CAPÍTULO 1: CRIADO POR INDÍGENAS

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Roy William Harper JR. o simplemente Roy nació en Utah, Estados Unidos, fruto de una relación ocasional entre su padre guardabosques de quien heredó su nombre y una mujer de la que nunca hablaba pues el niño fue dejado abandonado en la puerta de la casa del hombre con una nota donde explicaba todo, al principio pensó que era una cruel broma o un malentendido pero tras el análisis de ADN se confirmó que ese pequeño pelirrojo de ojos verdes era suyo.
El menor era el vivo retrato de su progenitor siendo muy parecidos físicamente solo que el mayor tenía una barba prominente.
Roy padre se hizo cargo del menor como pudo dejándolo en guarderías mientras trabajaba sino con niñeras cuando pasaba muchos días fuera y el pequeño sentía la falta, acorde iba creciendo sentía que su progenitor no lo quería prefiriendo su trabajo a sí.
Roy hijo empezó el jardín de niños siendo el único en ser criado únicamente por un hombre, su maestra fue la única figura materna en ese tiempo.
Él no era muy abierto con sus compañeros llegando a hacerle burla porque su madre lo dejó, el colorado a veces quedaba solo en la sala cabizbajo llorando para no ser visto pero su maestra lo invitaba a dejar su vergüenza porque él no tenía la culpa, sin embargo Harper JR. metió miedo afirmando preferir estar muerto.
La mujer pidió una reunión con el progenitor del muchachito y cuando ocurrió le comentó lo sucedido, el guardabosques dijo que fue inesperado saber sobre su hijo estando seguro de haberse cuidado la noche en cuestión pero no lo iba a abandonar como la madre hizo, la educadora sugirió a modo de afianzar el vínculo llevarlo a acampar en su trabajo así lograr que ambos se sintieran a gusto.
Harper SR. lo pensó bien.
El empleado cenaba con su hijo en la casa preguntando sobre su día en el jardín y él decía preferir estar muerto, al mayor no lo gustó oír eso comentando sobre esa charla con la mujer pero el colorado más chico hizo berrinche gritando no querer ir con él a ningún lado siendo un egoísta a quien no le importaba su vida, prefería vivir en una cloaca recibiendo una cachetada provocando que el agredido llorara corriendo encerrándose en su cuarto seguido por el empleo pidiendo perdón por levantarle la mano queriendo arreglar las cosas entre ambos, pero el de cinco años no creyó.
Los dos tuvieron una seria charla donde Harper SR. indicó no insistir más a modo de evitar peleas, Harper JR. quedó en silencio unos instantes hasta, con la voz seria, aceptar el trato, iría de campamento queriendo estar en contacto con la naturaleza.
La noche en cuestión el maduro lo llevó a destino aprovechando que eran vacaciones de Verano además de su jefe darle permiso para traer al niñito, los dos armaron la carpa saliendo a caminar con linternas tratando de no espantar a los animales, luego volvieron a la misma cerca de la fogata asando malvaviscos en ramas delgadas, hablaron un poco más hasta irse a dormir.
Mientras tanto reinó algo de viento provocando que las llamas se expandieran por el lugar generando un feroz incendio despertando a padre e hijo, el niño estaba muy alterado mientras el adulto trataba de apagar el siniestro con tierra pero resultaba incontrolable así que Roy SR. pidió correr en busca de ayuda a cualquier persona pasando cerca, no permitiría que su pequeño se quemara pero este no lo quería dejar sólo, el guardabosques le entregó un pequeño colgante plateado simbolizando una flecha disparada de un arco.
Ambos se abrazaron entre sollozos hasta despedirse, el pelirrojo más chico salió corriendo lo más rápido que pudo sin rumbo en medio de la oscuridad hasta tropezar con una raíz golpeando su cabeza.
Al despertar estaba adolorido y vendado ahí, parecía estar dentro de una enorme carpa pero pronto entró un anciano indígena de largos cabellos blancos y cejas igual, lo saludó y presentó como Arco Valiente del Pueblo Navajo, el pequeño preguntó dónde estaba y qué pasó con su padre, el nativo le entregó un periódico comprado por alguien de esa reservación contando lo ocurrido pero Roy no creía gritando querer ver a su progenitor pero Arco Valiente lo confortó diciendo hacerse cargo suyo al no tener más familia llamándolo por su nombre, él no entendía cómo lo sabía y el de piel trigueña agregó ser chamán pudiendo ver el pasado y el futuro, Harper lloró mucho.
Como era el más anciano de la tribu debían obedecer su voluntad y la misma indicaba querer hacerse cargo del huérfano pues lo había predicho en uno de sus rituales para comunicarse con los espíritus.
Técnicamente ninguno de los otros aborígenes estaba a favor de tener un blanco con ellos diciendo que los de su raza los habían encerrado en reservas cual animales salvajes, algunos exigían matarlo pero el viejo se los negó rotundamente amenazando con maldecirlos si trataban de lastimar al invitado.
El anciano volvió con el niño aún llorando exigiendo ver a su padre, Arco Valiente comentó que según el periódico Roy SR. se quemó todo quedando irreconocible y si lo veía quedaría traumado, aparte de eso como no tenía más familia podía ser llevado a un orfanato donde pasaría cosas peores, por eso sería como su nieto ahí enseñándole tradiciones de su pueblo pero sin olvidar ser blanco, Roy JR. no sabía cómo seguir adelante tras la tragedia.
El indígena lo trató bien siendo el único en la reserva en darle ese trato, lo vestía como uno de los suyos y los niños le hacían burla o ignoraban, los adultos ni querían verlo viendo en este a un representante de quienes casi los exterminaron durante los siglos de la Colonia hasta bien entrado el siglo XX, a pesar de su edad el anciano le enseñó arquería, por supuesto en sus primeros intentos fracasaba pero no se daría por vencido hasta ser un buen arquero como los niños aborígenes.

ROJO COMO LA SANGREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora