En busca de mi destino [Yami Sukehiro x Reader]

La mañana siguiente

(T/N) despertó con una mano rodeándola la cintura, fue entonces cuando flashbacks de lo que había pasado la noche anterior volaron por su cabeza.

- Buenos días preciosa –

- Buenos días Yami – dijo sonriendo. Era increíble lo guapo que estaba este hombre nada más levantarse, pese a su cara de sueño y su pelo alborotado, no podía ser más sexy.

- ¿dormiste bien?-

- Mejor que nunca – dijo ella, a lo que Yami sonrió y la besó la frente.

Después de un rato abrazados en la cama, mientras se debatían si pasarse ahí todo el día, en el pequeño mundo que habían creado; o bien, salir del cuarto como ya habían hecho el resto de miembros de la orden, se decantaron por la segunda opción y decidieron bajar a desayunar. Era relativamente pronto, más pronto de lo que acostumbraba a levantarse Yami, pero, la verdad es que hacía ya tiempo que estaba despierto, solo para ver como la mujer de la que se había enamorado dormía plácidamente a su lado, llenando su cara de besos de vez en cuando intentando no despertarla.

- ¡Buenos días capitán! – dijo Asta – ah y buenos días a ti también (T/N)...

(T/N) se sentó en el sofá mientras Yami fue hacia la mesa a coger algo de comida para desayunar. De repente, notó como alguien se sentaba a su lado, girando la cabeza vio a Vanessa sonriente.

- ¿habréis dormido bien después de lo de anoche, nooooo? – se notaba que estaba ya algo borracha pese a lo temprano que era, ¿Cómo era capaz de tolerar tanto alcohol en ese cuerpo, pensó la chica.

- ¿¡eh!? ¿a, a que te refieres?

- Venga ya... (T/N) ¿te crees que soy tonta?, además de que todos os vimos iros juntos, también se escuchó lo que el capitán y tu estuvisteis haciendo anoche... - Vanessa esbozó una media sonrisa mientras que (T/N) se ruborizaba.

- Se... ¿se oyó mucho? – estaba roja como un tomate, a punto de salir corriendo de aquella situación.

- Nah... pero ya sabes lo curiosos y cotillas que son aquí todos... realmente fue Finral el que subió hasta la habitación del capitán para decirle no sé qué de salir a la ciudad y os escuchó... dedujimos que la chica que no paraba de gemir eras tú porque os vimos marchar juntos... así que... ¿es tan bueno en la cama como para hacerte gritar así?

Definitivamente estaba a punto de salir corriendo, no sabía qué decir y no quería enfrentarse ahora mismo a esta situación. De repente Vanessa empezó a reír a carcajadas.

- ¡Es broma, es broma!, deberías verte la cara cariño... tranquila, no tienes que responder a nada – dijo giñando un ojo – estoy segura de que Yami es muy bueno en la cama – y siguió riendo fuertemente.

- Vanessa, déjala tranquila de una vez – era Yami quien, al notar lo incómoda que estaba (T/N) en esa situación y sabiendo lo descarada que podía llegar a ser Vanessa había acudido en ayuda de la chica. – Ven, (T/N), tenemos trabajo – dijo sonriendo.

Gracias a Dios que Yami la había sacado de aquella situación, pensaba que iba a desmayarse de un momento a otro de lo mal que lo estaba pasando.

Yami la agarró de la muñeca y la hizo salir por la puerta.

- ¿Dónde vamos Yami? ¿Qué trabajo tenemos?

- Ninguno realmente, solo quería sacarte de allí. Llegan a ser muy pesados y no necesito que se metan en nuestra vida privada. – Yami la retiró un mechón de pelo de la cara detrás de la oreja y la besó la frente. – Te necesito a ti y solo a ti ahora mismo, te quiero, (T/N).

- Yo también a ti Yami – (T/N) sonrió y se puso de puntillas para darle un ligero beso en los labios.

No es el mejor de los capítulos, pero quería continuar la historia porque hacía mucho que no escribía, no encuentro la inspiración para continuar, pero seguiré con ello!!! aún si no actualizo todas las semanas seguiré subiendo capítulos, y espero que os sigan gustando <3 cualquier sugerencia es bien recibida ;)

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