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Había pasado alrededor de media hora. Y en todo ese tiempo, había estado sufriendo un dolor que posiblemente dejaría loco a la mayoría de personas.

Tenía suerte de que ya había experimentado un dolor similar antes. O sino, ya hubiera cedido hacia mucho tiempo atrás.

En todo este tiempo, solo me la pasaba mirando el estado de mis estadísticas. Buscando si había algún problema en mi cuerpo. Además, también lo usaba para medir cuanto faltaba para que dejara de experimentar el dolor.

Solo rezaba por que no hubiera efectos secundarios en mi cultivo más tarde.

"¡Cough!" Una vez más volví a toser sangre.

No sabia cuántas veces lo había hecho ya, pero sabia que no eran pocas.

Mientras sufría, intentaba darle el visto bueno a la situación. Y era que después de esto, seguramente tendría más tolerancia al dolor en el futuro. Lo cual seguramente sería útil.

[Nombre: Long Yan]

[Fase de cultivo: Inferior]

[Etapa de cultivo: Cuarta]

[Salud: 11 / 4,600]

[Qi interno: (-) 01 / 6,100]

[Resistencia: 233 / 10,000]

Cuando vi lo poco que le faltaba a mi reacción violenta, una expresión alegre surgió en mi rostro. Afortunadamente no había usado una técnica más poderosa, como los [destellos consecutivos], o sino estaría en graves problemas.

Pero al menos esto también me hizo comprender que nunca, por nada en el mundo, utilice descuidadamente mis reservas de Qi.

Si podía ahorrar su uso, mejor.

Ya que si lo pensabas bien, esto jamás hubiera sucedido si no hubiera desperdiciado los [destellos consecutivos] contra aquella serpiente.

Pero ya no había nada que hacer, lo hecho, hecho estaba.

[¡La reacción violenta ha terminado!]

Con ese mensaje, todo dolor que sentía repentinamente desapareció y mi cuerpo regresó lentamente a la normalidad.

"Uf... uf..."

Cansado, respire agitadamente mientras relajaba mi cuerpo. Había estado sudando a mares todo este tiempo sin darme cuenta.

"¿Ya estás mejor?" La chica me preguntó preocupada, al darse cuenta de cómo mi cuerpo se relajaba.

"¿Hmm? Ah, sigues aquí" dije un poco sorprendido.

Creí que ella se había ido hacia ya mucho tiempo, después de todo, estaba demasiado ocupado sufriendo un dolor insoportable como para prestar atención a mi alrededor.

Después de darle un leve asentimiento con mi cabeza, ella pareció tranquilizarse.

Solo después de unos minutos en silencio, conmigo recuperándome de lo que acababa de pasar, por fin decidí involucrarme en una conversación con la chica.

"Oye, ¿por qué estabas en el bosque de almas?" No pude evitar preguntar debido a mi intensa curiosidad.

¿Que clase de persona común iría voluntariamente a un sitio lleno de peligros donde solo espera una muerte segura?

"..." ella se mantuvo en silencio un tiempo al escuchar mis palabras, antes de hablar.

"Mi madre enfermó. Así que intenté agarrar algunas bayas y otros frutos que crecen en el bosque para venderlos y así pagar la medicina que necesita mi madre"

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