Otro Camino [KNY]

Prólogo

Habían derrotado a Muzan al fin, con el sacrificio de tantas personas y Tanjiro se encontraba inmóvil.
Todos preocupados observaban cuidadosamente a Tanjiro, para ver si daba señales de vida, algún parpadeo, o aunque sea el movimiento de su respiración, pero no ocurría nada.

Hasta que su cabeza se dirijo hacia el cielo, alrededor de escucharon suspiros de alivio mientras nuestro querido Tanjiro abría los ojos lentamente. Los pocos médicos disponibles se iban a acercar a entenderlo de no ser que a Tanjiro de pronto, de un santiamén, su brazo perdido volvió a regenerarse.
En ese instante todo se detuvo, unos comenzaban a negar lo que estaba apunto de ocurrir y mientras pensaban, Tanjiro se empezó a mover, más rápido de lo normal, cómo un depredador listo para dar la primera mordida y terminar con la vida de quién se le ocurriera posarse enfrente de él.
Aún así también había gente esperanzada, el amanecer ya estaba allí, el ahora demonio perecerá y a pesar de que una vez hecho ceniza ya no presentaría peligro hubieran perdido un gran compañero…desafortunadamente o afortunadamente para algunos eso no sucedió, Tanjiro se quejo y gimió de dolor al sentir los primeros rayos del sol derretir su piel, pero nunca se convirtió en ceniza, al contrario parecía que se estaba acostumbrando al calor de la luz y su piel se regeneraba sin problema alguno.

Ahora se escuchaban las respiraciones aceleradas y pensamientos de derrota, nadie nunca se ha enfrentado a un demonio capaz de sobrevivir a la luz solar era imposible, hasta ahora claro, tampoco tenían la fuerza suficiente, todos habían sido derrotados luchando contra la Lunas y Kibutsuji Muzan, es impensable luchar contra aquel demonio recién creado y el más poderoso hasta el momento.

Todo paso muy rápido, Tanjiro en posición de cazador y aumentando sus extremidades a otras cuatro tal como Muzan, listo para matar y desgarrar, gente dudosa a enfrentarse a él y su hermana, corriendo esperando que todo esté bien.
Con su sed de sangre y hambre por la carne Tanjiro se lanza hacia la primera persona que ve, pero antes de siquiera poder soltar la primera mordida Tomioka lo detiene con su espada Nichirin, pero no es suficiente.

—¡TANJIRO! ¡DETENTE TANJIRO!—
Gritaba desesperado Tomioka, esperanzado de que dentro de ese ser demoníaco todavía se encuentre la esencia de su querido amigo.
Con una de las cuatro extremidades que salen de su espalda, pudo fácilmente deshacer de la irreconocible persona que lo detenía.
Una vez deshaciendo se del estorbo, otra vez se lanzo contra su presa herida, sangrante y petrificada, incapaz de moverse por el pánico, pero de nuevo fue de tenido, esta vez por nada más que un abrazo, mal recibido por nuestro querido demonio cansado de no poder ir tras su presa, se conformó con aquella que lo estaba abrazando, pudiendo al fin, probar aquella sangre que tanto anhelaba y la carne por la que se moría probar, ahí en la curvatura entre el cuello y el hombro. De su presa salió un grito de dolor y otros más de súplica, pidiendo que se detuviera, pero Tanjiro no escuchaba nada, más que una simple frase que se repetía una y otra vez en su mente “Te convertirás en el rey demonio” y así lo pensaba hacer, aunque todavía no sabía que quería decir exactamente esas palabra, las cumpliría, era parte de su instinto, una orden que con gusto y a cualquier costo cumpliría.
Ahora observando el panorama Tanjiro no dejaba ir el dulce néctar de la sangre, lo estaba disfrutando y le valía poco reconocer a su presa, si quería hermana, los gritos incrementaron, al parecer le decían que dejara de hacer…Aah, bueno no entendía lo que estaban diciendo, pero definitivamente esos gritos no le agradaban para nada, haciendo que su mordida se apretara más y su presa soltara otro grito de dolor y algo que tampoco comprendía era que su presa se aferraba a él, no podía estar más agradecido a decir verdad, estaba buscando la manera de salir de ahí, y que su presa no lo dejara ir le hacía sentir de alguna extraña manera amado?, será esa la palabra? No, lo hacía sentir que su presa no quería morir más que en sus brazos, que su presa quería que fuera desgarrada por sus ahora garras y sus temibles colmillos y lo hacía sentir Vivo, en éxtasis, pero como decía para cumplir con los sueños de su presa primero tendría que deshacerse de los terribles gritos de todas las otras presas.

Uno a uno se acercaban a Tanjiro para matarlo, fallando olímpicamente, pues a Tanjiro sentía que estaba jugando con unos insectos y o dudaría en aplastarlos fácilmente, hasta que un insecto no llevaba su espada Nichirin cómo los demás, en cambio llevaba un pequeño frasco, fuera lo que fuera no dejaría que se acercarán a él y a su presa.
Sin dudarlo llevo una de sus extremidades capaces de moverse como tentáculos y desgarrar hacia la mano que sostenía el misterioso frasco y de un tajo pudo desprender aquel brazo haciéndolo caer y en el proceso rompiendo la última esperanza que tenían todos esos insectos molestos de poder regresar a su amigo a la normalidad.
Ya, al fin ningún insecto se movía, sabía que uno que otro estaba luchando por su vida, pero por fin podría llevarse a su presa para darle fin a su mísera vida, así que sin problema alguno se alejo del hermoso poblado hecho añicos y se dirigió al bosque, con el sol en su punto más alto y su presa ahora queriendo alejarse de su toque no lo permitió, empezando a mordisquear por todo el cuello y brazos escuchando sus súplicas y dejando un rastro de sangre hasta que al fin, los gritos cesaron terminando en un pequeño suspiro y dejando salir su último aliento diciendo…Tanjiro, hermano por favor regresa…
A pesar de que esas palabras le intrigaron, las dejo pasar, cómo el viento que se lleva las hojas de otoño, dejando las en el olvido y posteriormente dando paso a su hambre que no había menguado siguiendo mordiendo y desgarrando la carne de tan delicado cuerpo dejando nada más que un cuerpo putrefacto con tan solo un poco de carne que termina siendo comido por los animales del bosque y uno que otro insecto, aquel cuerpo que fue su adoración, aquella persona que prometió nunca dejarle y cuidarle por el resto de su vida.
Quién diría que su protector termino siendo su verdugo….

(⁠｡⁠•̀⁠ᴗ⁠-⁠)⁠✧
Jaja que les dije, pasarán años y yo voy a seguir con este ff jajsjajsa, ya pues, la neta pido perdón y pues ya después de 100años les traigo el prólogo. También aviso pues que el prólogo es una prueba para ver más o menos que tipo de narración voy a utilizar, así que les gusta este tipo de narración que utilice me avisan y si no pues también opinen porfa, y otra cosa, recuerden que es como la continuación del manga aunque obviamente le cambié algunas cosas, avísenme también de cualquier falta de ortografía o incoherencia que encuentren por ahí.
Bueno pues, espero y les guste.
Ya les había avisado pero de todas maneras, les digo otra vez, en este ff el Tanjiro va a ser el malo pero malísimo de la historia, así que ps ya les avisé, luego no vayan a chillar jajjsa xd no c crean, no va a pasar nada malo, más o menos bno esperemos más bien, en fin.
Buenos días, buenas tardes o buenas noches, que se la pasen bien.
Me despido por ahora.
Etsuji✧⁠◝⁠(⁠⁰⁠▿⁠⁰⁠)⁠◜⁠✧