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Los días laborales eran una tortura.. Más teniendo a Robin y a Eddie como compañeros.

Robin iba en el asiento del acompañante mientras Eddie iba en los asientos de atrás, y Steve manejaba esperando a tener un accidente para que los gritos incesantes sobre la terrible vida amorosa de la rubia pararan. Apenas eran las 6 AM.

─..entonces ella me invitó a salir pero no sé si es una cita o solo "salir" como amigas!─ las manos de Robin estaban en su cara, probablemente arruinando la máscara de pestañas en sus ojos.

─ninguna chica que quiere "salir como amigas"─imitó la voz de Buckley─te invita a salir como ella lo hizo, es obvio que es una cita─

─Eddie tiene razón─ habló Steve por primera vez desde que se metieron al auto, para poder finalizar aquella estúpida discusión

─¿Lo ves? ¡Harrington me dió la razón!─ le dió un ligero golpe en el brazo a Robin

─ey, no me golpees─ se giró mirándolo mal y dándole un golpe en la pierna

─fué un golpe de amigos─ volvió a golpearla

Robin se quitó el cinto de seguridad para así pasarse a los asientos de atrás a golpear al de rizos.

─STEVE, AYUDA- ─Eddie gritó mientras se hacía bolita para que Robin no lo golpeara─¡EL SOLDADO DEL INVIERNO ESTÁ GOLPEÁNDOME!─

─DE MI MAQUILLAJE NO VAS A ESTAR HABLANDO, MUNSON─

─¿PUEDEN QUEDARSE QUIETOS UN MALDITO MINUTO?─

El castaño gritó desde su lugar mientras Robin y Eddie se comportaban como niños. Definitivamente odiaba su vida.

Al llegar a su trabajo, Eddie bajó del auto casi cayéndose mientras corría lejos de la pecosa, mientras Steve maldecía por lo bajo debido a sus decisiones de vida.

Abrió la puerta y dió vuelta el cartel en esta, la cual ─ahora─ decía "abierto".

Eddie corrió al interior mientras Robin lo seguía, Harrington tiró del brazo de la chica llamando su atención.

─si no se quedan quietos y hacen su trabajo juro que los encerraré en el baño para empleados y no los dejaré salir en todo el día─ 

─pero, ¡Él empezó!─ reprochó mientras su contrario solo la soltaba e iba detrás del mostrador

El día transcurría lento y aburrido para el trío, apenas habían clientes y la mayoría que venían no se llevaban nada.

─debí haber aceptado ese trabajo de niñera─protestó mientras descansaba su cabeza en la palma de su mano, mirando al castaño a su lado─deberías empezar a pagar por cuidar a los niños, Steve─

─estoy empezando a creer que tienes razón─ habló desde la silla en la que estaba sentado, con su cabeza tirada hacia atrás

─¡Chicos!─Eddie caminó hacia ambos─la luz del almacén se quemó y tienen que ir a cambiarla─

─hazlo tú─ Robin cerró sus ojos

─ya lo intenté.. Y me electrocuté─

─yo voy─ el ojimarrón se levantó de su lugar en un suspiro, caminando en la dirección del castaño

─que sería de mí sin tí, Harrington─ sonrió, mientras lo seguía hacia el almacén

Al llegar al almacén, Steve se subió en una escalera con el foco en la mano, mientras Eddie lo sostenía para que no cayera.

─lindo trasero, Harrington─

─concentrate, Munson─ murmuró mientras terminaba de cambiar el foco

─estoy concentrado─ habló de forma obvia

─pero no en mi trasero─ respondió de igual manera

─¿Falta mucho?─ resopló desviando su vista a algún rincón del almacén

─..listo─bajó de las escaleras, girándose hacia el rizado─de nada─

─sí, sí─ dió unas palmadas en su hombro  volviendo donde la rubia, mientras Steve lo seguía

─¿Por qué tardaron tanto?─ entrecerró sus ojos, mirando a ambos con sospecha

─Eddie no paraba de verme el trasero─

─¡Hey! Tú fuiste el que tardó en poner la bombilla. Además, es imposible resistirse a los encantos de tu trasero─

─por Dios, cállate y ponte a trabajar─ rodó sus ojos

─a sus órdenes, capitán─ caminó detrás suyo, dándole una bofetada en el trasero

─voy a matarte─

Eddie corrió, soltando una risa mientras Steve lo perseguía.

─idiotas─ murmuró Robin mientras veía la persecución