Reencuentro

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Habían pasado varios años, exactamente 10 para que Meng Yao volviera a ver a su primer amor, la chica que lo protegió ese día a él y a su madre. Desde ese día se esforzó para poder ser digno de ella, Meng Yao decidió ir a la Torre Koi para ser reconocido por su padre, si tenía un buen estatus entonces podría cortejar a la chica din problemas.

El joven se había enterado de que su salvadora era Wei Wuxian, la discípula principal de la secta Jiang, la joven vivía con el líder Jiang y su familia tras la trágica muerte de sus padres. A Meng Yao le dolió saber que el amable hombre que los ayudo había muerto durante euns cacería nocturna fallida en Yiling.

Lamentablemente Jin Guangshan no solo no lo reconoció, sino que lo pateo por las escaleras de la Torre Koi y le causo un dolor crónico en la cadera que posiblemente nunca se le quitaría, esa humillación siempre lo acompañaría. En ese momento empezaría con su venganza, su padre pagaría bien caro todo el daño que le provocó no solamente a él, sino también a su madre. Pero primero debía encontrar trabajo en otra secta, por suerte pudo ingresar a la secta Nie, lástima que no se salvó de las burlas de otros discípulos por su estatus de nacimiento, pero el propio Nie Mingjue lo defendió y no solo eso, sino que lo convirtió en su mano derecha.

Se sentía dichoso, sobre todo porque iría en representación de la secta Nie junto al hermano pequeño de Nie Mingjue. Así que podría volver a ver a Wei Wuxian si tenía suerte, para su fortuna Wei Ying estaba con el contigente Jiang y al parecer Nie Huaisang era muy bien amigo del heredero Jiang y Wei Wuxian.

-Meng Yao, te presento a Jiang-xiong y a Wei-shijie, la única mujer discípula principal de todas las sectas, la número uno en la lista de las cultivadoras-

Wei Ying se quedó viendo fijamente al chico, le recordaba a alguien que conoció en su infancia, pero debido a su mala memoria no sabía exactamente

-Un placer conocerte Meng Yao-hizo una pequeña reverencia-lamento que debas ser la niñera de Huaisang, eso nos pasa cada que va a Muelle de Loto-

-Wei-shijie-se quejo el Nie-eres tan mala-

-Pero si es verdad-resoplo Jiang Cheng-la última vez casi te caes del bote y todo por tu abanico-

-Ustedes son malvados conmigo, él no es mi niñera, es la mano derecha de Da-ge-

-Como sea, debemos entrar a presentar nuestros respetos-dijo el heredero Jiang, todos entraron al salón de clases y cada quien estaba en su respectivo grupo.

Meng Yao en cierta parte se sentía triste, la mujer que amaba no lo recordaba.

Las presentaciones iniciaron y los primeros fueron los Jin, la mayoría resoplo al ver qué eran unos auténticos pavoreales que a todo le ponían oro. Los Nie siguieron y Meng Yao decidió usar su don de la palabra para presentar su regalo y luego siguieron los Jiang, Jiang Cheng decidió hablar.

Para desagrado de todos llegaron los Wen, ahí estaba el segundo hijo de Wen Ruohan, Wen Chao y a su lado la mujerzuela que siempre lo acompañaba, Wang Lingjiao.

-Ya se fue todo al diablo-dijo Wei Ying fastidiada.

Para desgracia de Wei Ying, Wen Chao decidió fijar su asquerosa vista en ella y como no, si Wei Ying era una gran belleza. Meng Yao se molestó al ver la mirada que el Wen la estaba dando a Wei Ying. Wen Chao intento acercarse a ella, pero Meng Yao no se lo permitió.

-Dejala en paz, no tienes derecho a tocar a una dama sin su consentimiento-

-Tsk, cómo si un sirviente pudiera ordenarme que hacer-dijo el Wen burlón.

-Deja a Meng Yao en paz-dijo Wei Ying molesta-que él sea un caballero a diferencia tuya no te da derecho a atacarlo de esa manera-

-Además, Meng Yao es mano derecha de mi hermano, Nie Mingjue, si lo ofendes a él, es una clara ofensa al clan Nie -

Wen Chao se molestó por eso, pero todavía intento hacerle algo a Wei Ying.

-Vete de aquí-dijo la joven molesta-no eres bienvenido aquí y si me sigues molestando, dudo que a tu acompañante le digas gustando-dijo viendo la cara furiosa de Wang Lingjiao.

Wen Chao no tuvo más remedio que irse, pues el líder de la secta Lan, se enfureció con su comportamiento indebido.

-No tenías porque defenderme, muchas gracias-agradecio la joven a Meng Yao.

-No es correcto que alguien por ser de una secta poderosa abuse de ese poder-

-Lamentablemente los Wen son así y temo que las sectas lo van a seguir permitiendo hasta que escale a algo peor-

-Tenemos que estar preparados para lo peor-

-Mejor dejemos de hablar de cosas tristes, ya que las clases de cancelaron, podríamos ir al pueblo a comprar algo de comer y algunos dulces, tengo dinero ahorrado, vamos, te invito-

-Esta bien, sería un placer acompañarla-

El par estaba acercándose a la salida cuando un grupo de idiotas decidió aparecer y el primo de Jin Zixuan lo estaba dirigiendo.

-Zixun, ¿que es lo que quiere?-dijo Meng Yao-nosotros solo queremos irnos a disfrutar el día sin clases-

-Ignoralos y vámonos-dijo Wei Ying sabiendo como eran esos tipos-hay un puesto de dulces que quiero conocer-Simplemente Wei Ying paso de largo y Meng Yao la secundo.

Jin Zixun se sintió con el orgullo herido, ya se vengaria de ese par, pero decidió ser estupido e intentar algo en ese mismo momento.

-No sé que le ve a ese hijo de una prostituta, pero que se puede esperar de la hija de un sirviente, no ve a un hombre de verdad cuando lo tiene enfrente suyo-su grupo de seguidores se empezó a reír.

Wei wuxian se enojo y agarro a Jin Zixun del cuello.

-Mira escoria Jin, no serías nada sin tu tio, tu nivel de cultivador es inferior a la mayoría, tu primo ese pavo real se avergüenza de tenerte como familia-Y dicho eso lo dejo inconsciente de un puñetazo y luego empujó al tipo hacia su grupo de seguidores-Vuelven a decir una tontería y Madame Jin va a sacarlos a patadas de la secta, vamos Meng Yao, los dulces no nos van a esperar-

Meng Yao estaba sorprendido, la mujer que amaba seguía siendo fuerte y valiente, él  se propuso que haría lo mejor para estar a su nivel. Wei Ying y Meng Yao llegaron al mercado en espada y la joven de inmediato fue a comprar dulces.

-Mira, son figuras de caramelo-señalo los dulces en exhibición-deja compro un par, busca otros-

El joven asintió, mientras buscaba encontró un colgante de jade con forma de loto, era perfecto para la chica, uso el dinero que tenía para comprarselo.

-Encontre algo perfecto para ti-dijo el joven nervioso-espero que te guste-La chica se dio vuelta y quedó maravillada con el colgante.

-Meng Yao eso debió costar mucho...-

-Descuida, no fue nada, te lo mereces-

-Yo...gracias-dijo con una sonrisa y tomo el colgante para después colocarlo en su faja-es muy bonito-

El par termino de comprar sus dulces y todavía paso a un puesto de comida extranjera, ambos disfrutaron de los platillos que ahí servían. Ambos regresaron a Cloud Recesses y cómo todos se habían enterado de como terminó Jin Zixun, no se atrevieron a comentar nada por el temor que tenían hacia Wei Ying. La chica imponía respeto, no por nada era la única mujer en ser discípula principal.

Meng Yao se juro así mismo que se convertiría en alguien poderoso y respetable para estar a la altura de Wei Ying y así poder casarse con ella y acabaría con todos los que intentaron pisotearlo. Empezaría con su padre, para que lo reconociera, ese hombre le debía mucho a él, pero sobretodo a su madre. No importaba lo que tuviera que hacer, conseguiría lo que deseaba y acabaría con quién quisiera alejar a Wei Ying de su lado.

Deseo egoístaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora