Jardín de amapolas rojas

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"sueños"

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Últimamente he estado teniendo malos sueños. Kenchin dice que es por no tener un buen horario para ir a dormir, pero eso no tiene sentido. El abuelo dice que por andar peleando todos los días y Emma dice que quizás sea algo que me está atormentando inconscientemente. No importa lo que sea, quiero que pare.

Shinichiro seguro hubiera sabido la respuesta a la razón de mis pesadillas.

...- No temas , aquí estarás bien.

Me levanto exaltado por aquella voz , veo a mi alrededor y me sorprendo al ver que ya no estoy en mi habitación , "¿Esto es un sueño?" , "¿dónde estoy?"

Es de noche, pero aún así puedo observar el gran jardín repleto de hermosas amapolas rojas. Despierto de mi ensoñación con el paisaje y me fijo más adelante. Hay un chico de cabellos negros y rizados, su cara está borrosa.

-¿Quién eres? -Le cuestiono al chico misterioso. A pesar de estar asustado mi voz no titubea.

El chico se acerca y yo me levanto del lugar en donde anteriormente estaba tirado. Su presencia me transmite paz, por alguna extraña razón.

...-Quien sea yo, aquí y ahora no importa. Más importante es cómo estés tú, ¿haz estado llorando?, tienes tus ojitos hinchados.

Se aproxima mientras sostiene mi rostro con sus manos, "están frías". Delinea mis ojos suavemente con sus finos y delicados dedos, quitando cualquier rastro de lágrimas.

-Espera. ¿Quién eres? ¿Dónde estoy? ¿Cómo llegué aquí? -quería respuestas, pero el chico solo soltó una pequeña risa.

...-Muchas preguntas, mi pequeño. dime , ¿por qué llorabas?

Lo pensé un poco y ¿qué más da? Después de todo es solo un sueño, ¿verdad? No tengo nada que perder.

-¿Sabes? Se supone que soy el "invencible Mikey" , no puedo caer de esta manera. Constantemente quiero desahogarme, soltarlo todo, pedir ayuda. Pero mi orgullo me lo impide. No quiero verme débil, no quiero que me vean así de vulnerable; porque yo soy quien les tiene que dar apoyo a ellos, yo debo de guiarlos, porque soy el líder...Porque es lo que Shinichiro hubiera hecho.-

-Perdí a mi hermano por culpa de alguien cercano a mi. Era nuestro amigo, a todos nos dejó estupefactos saber lo que hizo. Todos estábamos mal, por eso, decidí ser yo quien los mantuviera bien, me puse una máscara, me volví invencible... El invencible Mikey, no puede caer de esta manera tan lamentable. Yo... En realidad, no lo soy. No soy invencible.

Levanté mi vista la cual mantuve baja todo el rato que hablaba, visualicé mejor a la persona que tenía delante, ahí enfrente a mi, el chico de cabellos negros tenía unos hermosos ojos azul cielo, llenos de lágrimas. Se deslizaban delicadamente por su fino rostro, era un extraño, no me conocía, pero lloraba por mi y mis estupideces. Me veía afligido como si le doliera en lo más profundo de su alma todo lo que me pasaba.

...-Debe doler mucho...Como si no pudieras moverte, aunque intentaras huir. Aunque grites, desgarres tu garganta, nadie te escucha. Todos piensan que estás bien, cuentan con que podrás protegerlos a todos, pero el que necesita ser protegido eres tú. Necesitas ayuda Manjiro.

En ese momento, me sentí comprendido. Por primera vez, me siento consolado, me duele el pecho pero aún así no puedo evitar seguir hablando.

-Sí, es exactamente eso. Realmente duele demasiado. Intento ser fuerte, imparable, pero al final, solo soy un humano.