𝐒𝐓𝐀𝐘 | 𝒲𝒾𝓁𝓁 ℬ𝓎ℯ𝓇𝓈

𝒲 | 𝗧𝗪𝗘𝗟𝗩𝗘

Los hermanos Byers juntó a Olivia Russo, se encontraban llegando a tal destino.

- Es en esa casa gris - indicó Olivia, a lo que rápidamente se estacionaron.

El auto se detuvo en tal casa, al bajarse, Will notó que estaba una señora limpiando sus lágrimas con una toallita.

Olivia y Jonathan decidieron esperar en el auto, pues no querían interrumpir alguna plática.

La señora al ver al adolescente camino rápidamente hacía el - ¿Tú eres Will? - preguntó la señora Roussel.

Esté asintió levemente algo confundido - Pasá, ella desea verte desde hace tiempo, Elaine se encuentra en la habitación a la derecha - el castaño sonrió ante tal comentario.

Al entrar a tal cuarto, visualizo un cuarto color lila, el cuál estaba decorado a la niñez y algunos póster's.

Al buscar con la mirada, vió a un doctor, a lado de el, en la cama se encontraba la chica castaña.

- Will - llamó Elaine con una débil sonrisa.

- Elaine - este se acercó rápidamente para abrazarla sin lastimarla - ¿Qué te pasó? ¿Por qué tienes oxígeno? - preguntó rápidamente.

El doctor al escuchar tal plática salió de la habitación.

- Me diagnósticaron cáncer de pulmón no microcítico - explicó sin más - Desde hace casi dos meses.

- ¿Por qué no me lo dijiste? - cuestionó Will después de unos segundos mientras sus lágrimas lo traicionaban.

- Perdón, nunca pensé que de repente alguien cambiará mi vida, estaba segura que moriría sin ser feliz - explicó mientras tomaba las manos del chico - Pero tú cambiaste eso, los días, y semanas en las que te conocí, fué lo mejor que me pudo pasar para poder irme feliz.

Byers empezó a llorar - ¿Por qué no estás en un hospital? Te pueden atender - preguntó esperanzado.

Elaine negó - Will, no hay nada que hacer, ya está dicho por todos los doctores - explicó mientras limpiaba sus lágrimas - Tuviste un papel importante en mi vida.

Elaine bajó un tanto su gorro, dejando ver que su cabello y sus típicas mechas rosas, ya no estaban - ¿Sigo siendo bonita? - preguntó con una débil risa.

El castaño limpió sus lágrimas aunque era en vano ya que salían más - Lo eres, siempre lo serás - respondió mientras en sus mejillas se juntaban las lágrimas.

Will se encontraba triste y un tanto confundido, no entendía como la chica estaba sonriendo apesar de la situación, sin duda era algo que el admiraba de Elaine.

- Perdón - se disculpó la chica, aunque Will no entendió - Perdón por no quedarme, como te lo había prometido.

El chico la abrazó rápidamente, así se quedaron unos cuantos minutos, pues ya hacía tiempo que no se veían, y ante tal noticia, lo único que quería Will era estar cercas de ella.

- ¿Puedo quedarme estos días? Quiero estar contigo - cuestionó aún sin separarse.

- Por supuesto, aunque no creas que porque estoy débil dejaré de molestarte - Elaine río a lo que Will sonrió débilmente.