Cuatro - Rendezvous und Parken

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- ¿Entonces por cuánto tiempo te irás?- pregunto el soviético quien caminaba al lado del alemán.

- Alrededor de una semana- contesto tranquilo, el día de dichosa salida había llegado y el comunista junto con el nazi caminaban tranquilamente hasta un restaurante costero nuevo que apenas abrió ese mismo día.

Alemania se había ido desde temprano con su tío al parque ya que no hiba a desperdiciar los boletos.

- ¿Estás seguro? Está algo lejos- trato de persuadir al menor ya que si bien se conocían desde hace bastante tiempo y después de años de cortejo este había aceptado estar con el, así que aprovecharía eso y para eso tenía que despegar a Alemania de Third Reich ya que según el parecía una garrapata con su alemán.

- Si, desde hace tiempo también he querido ir- comento tratando de mantener la calma y no golpear al otro por su insistencia.

- Bueno- dijo el soviético para continuar el camino con el menor ya que estaban a menos de un metro de llegar- Buenas tardes, reservación para la unión soviética- dijo urss ya que se había encargado de realizar esa reservación.

- Claro, adelante- exclamó la joven de la entrada para posteriormente guiarlos hasta su mesa donde les dejo el menú y les indico que en unos minutos un mesero iría a tomar su orden.

-¿Puedo ir?- pregunto el soviético de la nada mientras desviaba su mirada del menú a su pareja.

-¿Qué?- pregunto Reich al no entender del todo la pregunta.

- ¿Qué si puedo acompañarte a ti y a Alemania a ese lugar?- concreto mejor la pregunta.

- No se- Reich volteo un poco la mirada a la mesa- le prometí a Alemania que solo seríamos el y yo- contesto tranquilo mirando ahora al ruso frente suyo que tenía una mirada de súplica- pero le comentaré a Alemania, haber que opina- dijo para que el contrario dejara el tema.

- Está bien - dijo no muy convencido - ¿Ya sabes que vas a ordenar?- pregunto el soviético volteando su mirada hacia el mundo que tenía en la mesa.

- Aún no ¿Y tú?- pregunto Third Reich viendo de igual manera el menú que tenía.

Después de un rato una mesera llegó a tomar la orden y para después de unos minutos traerla a la pareja.

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Mientras tanto Alemania y Weimar se encontraban en el parque, más específicamente comiendo en un puesto de hamburguesas.

- ¿A qué juego te quieres subir?- pregunto Weimar para tomar de su refresco.

- A los carros chocones- dijo Alemania tranquilo mientras comía de sus papas.

"De lo que se pierde Third" pensó Weimar ya que le parecía más entretenido estar en el parque que en un restaurante.

- Onkel- llamó Alemania a su tío quien lo volteo a ver dándole a entender que lo escuchaba- ¿Crees que mi vater y el señor urss en algún momento se vallan a casar?- pregunto tranquilo observando su comida.

-¿A qué se viene esa pregunta?- pregunto Weimar ya que no esperaba ese tema.

- Bueno, a mi vater se le nota que lo quiere, además está en su derecho de vivir su vida- comento tranquilo.

Ist mein VaterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora