Ist mein Vater

Cinco - ein kleines Date

Al día siguiente, toda la familia alemana se encontraba desayunando con tranquilidad.

- Y después fuimos por un helado - relataba Alemania los acontecimientos de su salida anterior con su tío al parque de atracciones.

- Enserio se lo pasaron bastante bien - exclamó el imperio alemán- talvez valla también - comento mientras se imaginaba en la rueda de la fortuna con cierto country tricolor.

- Es un lugar bastante agradable- menciono Weimar mientras le robaba comida a su hermano.

- Deja!- exclamó Third Reich mientras intentaba alejar a su hermano de su plato.

Alemania por su parte simplemente rio un poco ante la escena de su tío y padre- ¿Cómo es tener hermanos?- pregunto Alemania de la nada, logrando que los dos alemanes que anteriormente estaba peleando se calmara.

- Horrible - fue lo que dijo Reich a su hijo - agradece que eres hijo único - menciono mientras continuaba comiendo.

- ¿Y los hijos del soviético ese?- pregunto Weimar a su hermano.

- No estamos casados así que no cuentan- exclamó, apenas podía con Alemania no sabía que haría si en algún momento se llegará a casar con la URSS.

- Respecto a tu pregunta...- dijo Weimar volteando su mirada a su sobrino- a veces los amas y otras los odias- dijo tranquilo mientras le revolvía el cabello a su hermano menor quien lo miro algo enfadado y tomando la mejor decisión para el, le mordió la mano, sacándole un grito de dolor al mayor de los dos

- Maldición!, ¿Por qué no pueden estar 5 minutos sin pelearse?- exclamó cansado el imperio alemán.

- El empezó!- exclamaron ambos alemanes al mismo tiempo, sacando un suspiro del mayor de los alemanes presentes, amaba a sus hijos pero estos harían que le salieran canas por el estrés de sus peleas.

- Por cierto URSS vendrá hoy en la tarde- comenta Reich una vez que la pelea anterior había acabado.

- ¿A ese no lo quieren en su casa o que?- pregunto el imperio alemán ya que la URSS buscaba cualquier excusa para ir a la casa alemana y pasar tiempo con su hijo menor.

- No es eso- dijo Third Reich mientras soltaba un suspiro- solamente dice que quiere verme- comento con una ligera sonrisa, se le hacía demasiado cursi pero por algo le gustaba.

- Efectivamente no lo quieren- comento Weimar al notar la sonrisa de su hermano.

- Por cierto saldré en la tarde- comento Alemania antes de que su padre empezará a pelear con su tío de nuevo.

-¿Con quién?- pregunto Third Reich volteando a ver a su hijo.

- Con Rusia- comento con una sonrisa.

- ¿Y si mejor viene a la casa?- propuso el imperio alemán.

- Me parece buena idea- comento Third Reich ya que si bien Alemania tenía varios amigos, no sé confiaba ya que a algunos se les notaba que tenían otras intenciones con su hijo.

- Se lo comentaré- dijo Alemania algo nervioso, el esperaba poder pasar esa tarde a solas con Rusia.

Ya en la tarde, alrededor de las 2:00 pm, Weimar se encontraba acomodándose su chamarra.

- Papá y yo iremos a por algunas cosas para la cena- comento Weimar mientras se aseguraba de llevar todo.

- Traigan chocolate- dijo Third Reich mientras se acomodaba en el sillón.

- No, debes dejar de comer tanto dulces- exclamó el imperio alemán a su hijo.

- Pueden traer aunque sea un poco, por favor - pidió Alemania observando al imperio alemán con una carita de cachorro.

- Eso es trampa- dijo el imperio alemán mientras volteaba a ver a otro lado- está bien, pero solo una barra- exclamó sacando una sonrisa del alemán menor y una risa de su hijo mayor. Ciertamente Alemania era alguien algo serio con todos pero con su familia era diferente.

Una vez Weimar y el imperio alemán se fueron, Alemania se sentó al lado de su padre quien le revolvió el cabello y lo abrazo por los hombros- bien hecho- comento, sacando una sonrisa del menor; Alemania y el siempre trabajaban juntos para poder obtener dulces ya que el menor había heredado el gusto por lo dulce como el.

El momento fue interrumpido por el sonido del  timbre de la casa, siendo Third Reich quien se dirige a abrir.

- No se supone que irías con Alemania a algún lugar - comento la URSS después de que su hijo le comentará que estaría en la misma casa que el, se supone que Rusia se llevaría a Alemania y dejaría que el y Third estuvieran solos.

- Al final decidimos que estaríamos en su casa jugando videojuegos- comento tranquilo, ya se sabía el plan de su padre pero el haría lo que el alemán menor quisiera y si el se quería quedar a fastidiar la cita de su padre el lo ayudaría.

La conversación fue interrumpida por el sonido de la puerta siendo abierta- llegaron - exclamo Third Reich una vez que observó a ambos rusos en la puerta de su casa.

- Дорогой (cariño)- exclamó dándole un beso rápido al contrario.

- Добрый день, сэр (buenas tardes señor)- dijo Rusia al notar la mirada que el alemán le daba.

- Pasen - fue lo único que dijo observando detalladamente a Rusia quien al entrar y  ver a su hijo lo abrazo levantando lo un poco del suelo.

- Tranquilo, no le hará nada- comento URSS al ver cómo observaba a su hijo. Por su parte Third Reich solamente suspiro, tal vez era cierto y solamente estaba siendo paranoico y su hijo no tenía ningún interés amoroso en nadie.

- ¿Quieres jugar videojuegos?- pregunto Alemania a Rusia quien solo afirmó con la cabeza para posteriormente ayudar a conectar la consola.

- Iré por palomitas - comento Third Reich dándose la vuelta para ir a la cocina.

- ¿Para que?- pregunto URSS.

- Quiero disfrutar como mi hijo humilla al tuyo en videojuegos - comento tranquilamente para ir definitivamente a la cocina.

- Querrás decir que mi hijo humilla al tuyo- dijo URSS, el confiaba en que su hijo ganaría más de la mitad de las rondas del juego.

- Eso veremos- comento Third Reich con una mirada desafiante.

La tarde paso con varios videojuegos, el ambiente se había vuelto bastante competitivo.

- Vamos Alemania - comento Third Reich al observar como su hijo pasaba a segundo lugar en un juego de carreras.

-Rusia si ganas te volverás mi favorito- exclamó la URSS a su hijo quien competía por el primer lugar.

- Llegamos!- exclamó Weimar entrando a la casa con varias bolsas.

- Pensé que el ruso terminaría saliendo a algún lado con Reich - exclamó el imperio alemán al observar como su hijo apoyaba a su nieto para ganarle al hijo del soviético en el juego.

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Al fin acabe el capítulo, lamento la demora estaba salvando el semestre, así que aprovecharé mis vacaciones para intentar subir más capitulos.

¿Qué les pareció?

¿Alguna duda?

¿Algo que quieran que pase?

Ya se habrán dado cuenta que me decidí de una pareja para Alemania, no estaba en mis planes pero bueno, sucedió algo y me decidí  a ponerla; igual que la de imperio alemán aunque aún no se especifica bien quien es.

Pero bueno pueden dar opciones para la de Weimar o si gustan lo dejo soltero.

Bueno comento que estaré haciendo algunas correcciones en los anteriores capitulos, más que nada en la ortografía, los estaba releyendo para poder hacer este y encontré algunas.

Sin más, hasta el siguiente capítulo.