Tú eres hermana de Saori y siempre te llevaste bien con todos y eso fue lo que te condenó...
°•Actualizaciones lentas•°
°•Créditos a Masami Kuramada por los personajes•°
°•Esta historia puede contener•°
♡Acoso
♡Escenas s3xual3s
♡Lenguaje ofensivo
♡M...
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Era un hermoso día en la mansión Kido. El jardín, bañado por la luz del sol, ofrecía un espectáculo de flores y verdor.T/N, estabas absorta en la lectura de un libro, disfrutando de la tranquilidad del momento. A tu alrededor, los aspirantes a caballeros se dispersaban en diversas actividades: algunos jugaban con entusiasmo, otros conversaban animadamente, y algunos simplemente disfrutaban del sol. La paz reinante se vio interrumpida por la llegada de tu hermana, Saori.
-Estás loca si crees que voy a ser tu caballo -𝐫𝐞𝐩𝐥𝐢𝐜𝐨́ 𝐒𝐞𝐢𝐲𝐚, 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐦𝐞𝐳𝐜𝐥𝐚 𝐝𝐞 𝐢𝐧𝐜𝐫𝐞𝐝𝐮𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐲 𝐦𝐨𝐥𝐞𝐬𝐭𝐢𝐚 . En ese instante, Seiya sintió un agarre firme en su camisa. Al voltear, se encontró con la mirada severa de Tatsumi.
-Escucha, niñato, la señorita quiere que seas su caballo. Así que obedece, o...
Tatsumi fue interrumpido por la voz de otro niño, Jabu, quien se acercó rápidamente.
-No pierda el tiempo con Seiya, él jamás aceptará. Señorita Saori, permítame ser su caballo -𝐝𝐢𝐣𝐨 𝐉𝐚𝐛𝐮, 𝐩𝐨𝐧𝐢𝐞́𝐧𝐝𝐨𝐬𝐞 𝐚 𝐜𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨 𝐩𝐚𝐭𝐚𝐬 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐚𝐜𝐭𝐢𝐭𝐮𝐝 𝐬𝐞𝐫𝐯𝐢𝐜𝐢𝐚𝐥.
Jabu, con una mezcla de resignación y deseo de complacer a Saori, gateó lo más rápido que pudo. La escena era grotesca, pero Saori parecía disfrutarla. La llegada del señor Kido puso fin a la humillante cabalgata. Saori, al ver a su abuelo, corrió hacia él con una alegría desbordante.
-¡Abuelo! -𝐞𝐱𝐜𝐥𝐚𝐦𝐨́, 𝐚𝐛𝐫𝐚𝐳𝐚́𝐧𝐝𝐨𝐥𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐳𝐚.
-Saori, es probable que no veas a estos niños como personas o amigos, sino como sirvientes -𝐝𝐢𝐣𝐨 𝐞́𝐥 𝐬𝐞𝐧̃𝐨𝐫 𝐊𝐢𝐝𝐨, 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐭𝐨𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐫𝐞𝐩𝐫𝐨𝐜𝐡𝐞 𝐬𝐮𝐚𝐯𝐞-. Escucha, en el futuro tendrás que trabajar con ellos, así que es mejor que aprendas a llevarte bien.
-Jabu, disculpa la actitud de mi hermana, ella siempre ha sido así -𝐃𝐢𝐣𝐢𝐬𝐭𝐞, 𝐚𝐜𝐞𝐫𝐜𝐚́𝐧𝐝𝐨𝐭𝐞 𝐚 𝐉𝐚𝐛𝐮 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐞𝐱𝐩𝐫𝐞𝐬𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞 𝐯𝐞𝐫𝐠𝐮̈𝐞𝐧𝐳𝐚 . -No te preocupes, T/N, estoy bien, no son heridas graves -𝐫𝐞𝐬𝐩𝐨𝐧𝐝𝐢𝐨́ 𝐉𝐚𝐛𝐮, 𝐧𝐞𝐫𝐯𝐢𝐨𝐬𝐨 𝐩𝐨𝐫 𝐭𝐮 𝐜𝐞𝐫𝐜𝐚𝐧𝐢́𝐚 . Algunos de los niños observaban la escena con resentimiento, celosos de la atención que le prestabas a Jabu, pero reprimieron sus sentimientos.
La noche cayó sobre la mansión, y la cena transcurría en un ambiente tenso.
-Saori, ¿por qué tratas así a esos pobres niños? -𝐩𝐫𝐞𝐠𝐮𝐧𝐭𝐨́ 𝐞𝐥 𝐬𝐞𝐧̃𝐨𝐫 𝐊𝐢𝐝𝐨, 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐭𝐨𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐧𝐬𝐚𝐧𝐜𝐢𝐨.
-Abuelo, es obvio. Ellos salieron del orfanato gracias a ti, así que deben obedecer a los Kido -𝐫𝐞𝐬𝐩𝐨𝐧𝐝𝐢𝐨́ 𝐒𝐚𝐨𝐫𝐢, 𝐣𝐮𝐠𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐝𝐢𝐬𝐭𝐫𝐚𝐢́𝐝𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐜𝐨𝐧 𝐬𝐮 𝐜𝐮𝐜𝐡𝐚𝐫𝐚.
-Saori, esos niños son iguales a ti. Debes aprender a llevarte bien con ellos, ya que en el futuro trabajarás con ellos.
-¿Trabajar con ellos? ¡Ni loca! Prefiero morir antes que trabajar con...
-¡Saori, basta! No toleraré esto. ¡Vete a tu habitación! -𝐠𝐫𝐢𝐭𝐨́ 𝐞𝐥 𝐬𝐞𝐧̃𝐨𝐫 𝐊𝐢𝐝𝐨, 𝐩𝐞𝐫𝐝𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐥𝐚 𝐩𝐚𝐜𝐢𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚.
Saori, con una mirada de furia, se levantó de la mesa y se marchó. Tú y tu abuelo terminaron la cena en silencio.
-T/N, espero que no compartas la forma de pensar de Saori -𝐝𝐢𝐣𝐨 𝐞𝐥 𝐬𝐞𝐧̃𝐨𝐫 𝐊𝐢𝐝𝐨, 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐬𝐮𝐬𝐩𝐢𝐫𝐨.
-No te preocupes, abuelo, soy consciente de que esos niños han sufrido bastante -𝐫𝐞𝐬𝐩𝐨𝐧𝐝𝐢𝐬𝐭𝐞, 𝐜𝐨𝐧 𝐬𝐢𝐧𝐜𝐞𝐫𝐢𝐝𝐚𝐝 . -Me alegra saber que no eres como tu hermana. Bueno, será mejor que vayas a dormir, ya que mañana tienes clases de piano.