Deseo | One Shots x Oscar Isaac

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Duke leto atreides x fem!reader

"Mía. Tuyo"

Autor y fuente: https://moon-kn1ght.tumblr.com/post/657441865817292800/mine-yours

Advertencias: PWP, he leído duna, pero no retuve nada más que Duke Seggsy, marking kink, dom/subvibes, exhibicionismo, desprotegido p in v (relación establecida), light breathplay, no y/n, no beta'd

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Sus ojos oscuros te acechaban al otro lado del pasillo, en una habitación dónde habían cientos de personas, pero aún así, todavía podías sentir su mirada en tu cuerpo. Otros ojos también te observaron, pero los ojos del duques fueron los únicos a los que prestaste atención.

Bailaste con dignatarios, charlaste con otros políticos de élite. Pequeñas charlas, conexiones sin sentido; quieres que acabe la noche. Anhelas estar envuelto en los brazos de tu duque una vez más.

De repente, sientes una mano caliente familiar envuelta alrededor de la parte superior del brazo. Su aroma invade tu nariz y te abruma —canela y roble—, tú amante está cerca. Te inclinas hacia el tacto y te vuelves hacia él.

Su rostro todavía tiene mucha juventud, a pesar de que años de política han convertido sus rizos y barba en sal y pimienta. El calor de sus ojos se encuentra con el tuyo, suplicando. "Mi duque", dices, inclinando la cabeza con la cortesía tradicional que se espera de ti bajo muchos ojos.
En tu dormitorio, tu duque no espera tales cortesías. Allí, tu sumisión se gana y no es dada.

"Mi señora", dice Leto, "¿Puedo tener una palabra?"

"Por supuesto, mi duque" Respondes, asintiendo con la cabeza educadamente a tu empresa actual mientras excusan tu ausencia.

La mano de Leto no sale de tu brazo mientras los dos os abréis camino rápidamente a través de la habitación hasta un pasillo. Es un pasillo utilizado por los sirvientes que se garantiza que estará vacío a esa hora.

La luz es tenue una vez que se cierra la puerta de la sala principal, lo que te da a ti y a Leto algo de privacidad. Inmediatamente su boca está en tu cuello. Su barba cepilla tu piel sensible de la manera más maravillosa, haciendo que suprimas un gemido.

"Leto", susurras, "¿Dijiste que había algo en lo que necesitabas mi consejo?"

"Sí, mi amor", murmura contra tu cuello. "El problema es que parece que no puedo apartar los ojos de ti esta noche"

"Hmmm, no estoy segura de que tener la boca sobre mí vaya a ayudar a aliviar ese problema, señor", replicaste sonriendo.

Se encuentra con tu sonrisa con sus labios, y su lengua entra fácilmente en tu boca. Aunque eres bastante hábil en la negociación diplomática, crees que el mejor propósito de su boca es traerte placer. Le devuelves el beso, hambrienta por más.

"No puedo dejar de pensar en todas mis marcas en ti, debajo de ese vestido. Sobre lo afortunado que soy de ser el único hombre que puede adorar tu cuerpo, soy el único que puede hacerte mía"