Hoy era el día en que darían a Freddy de alta en el hospital, y Toy Freddy llegó a primera hora sólo por lo emocionado que estaba, el castaño estuvo dos días esperando la palabra del doctor para que el oso fuera libre de irse a casa a descansar, aunque, no descansaría precisamente.
-¡Ah! Doctor, ¿Ya puedo llevarme a Freddy? -Parecía verdaderamente un niño pequeño esperando por sus dulces, el doctor se limitó a sonreír y asintió.
-Por supuesto, tendrá que tenerlo en vigilancia por un tiempo, tratando de qué no se meta en problemas. -El oso se llenó de un sentimiento de ira, o claro que no se metería en problemas.- Eso seria todo, recuerde llenarle de mimos y amor al pobre. -Era raro, juró ver florecillas y arcoiris alrededor del doctor.
Toy Freddy dejó un momento al doctor e ingresó a la habitación del oso, el ya estaba listo para irse, le sonrió cálidamente para darle un abrazo no tan fuerte debido a sus heridas aún, éste correspondió al instante, necesitaba de aquella cercanía, al fin ese sentimiento de protección aparecía de nuevo.
-¿Listo para irnos? -Se separó un poco para escuchar la respuesta por parte de su ahora pareja.
-Sí, vámonos. -Tomó con timidez la mano del otro hasta quedar entrelazadas, al salir se despidieron del doctor y las enfermeras, agradeciendo por todo, afuera estaban los demás, quienes se abalanzaron con cuidado hacia Freddy envolviéndolo en un abrazo grupal, al fin podían ver a salvo a su amigo, el local no era lo mismo sin su tan agradable presencia.
Se encaminaron hacia el local, mientras Chica no dejaba de mimarlo, junto con Toy Chica, incluso le preguntaron si algún enfermero le coqueteó durante su estadía en el hospital, Freddy se sonrojó, y Foxy las llamó idiotas. Toy Freddy parecía celoso.
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- Diviertánse. -Ese era el tono medio malévolo y fujoshi que ponía la rubia en el doble sentido de sus palabras, Freddy y Toy se quedarían solos hoy en el local, a petición del oso y Chica, a saber porqué Chica se metió a la discusión, se los dejo de tarea.
Después de que todos se fueron, un silencio incómodo inundó el local, Freddy se quedó unos cortos minutos mirando a la puerta, para luego voltear y ver a Toy Freddy algo inquieto, el oso quiso preguntarle el porqué de su repentina actitud, pero prefirió callarse.
-Y bien... -El castaño rascó con insistencia su nuca, aproximándose con lentitud ante el otro, quien al verle cerca, abrió sus brazos para recibirle en un abrazo que el otro no pudo negar.- Hm... Extrañaba esto.
-Creeme, yo igual. -Ambos rieron, y Toy Freddy besó con delicadeza la frente de su contrario.- Freddy... Lo del hospital era cierto. -Acunó en sus brazos al oji azul, a su vez que éste se sonrojaba, por supuesto que recordaba a la perfección sus palabras.- Déjame hacerte el amor.
Freddy apretó un poco el agarre de ambos, y susurró un sí algo tímido.
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Sus lenguas se unían como si fueran una sola, degustándose a su manera, danzando con una música relajante de suaves gemidos, las manos de Toy Freddy recorrían con sensualidad la espalda de su contraparte, dejándolo apoyado sobre la mesita de noche junto a la cama, Freddy se aferraba con mucha fuerza a los hombros de su contrario, era tan inexperto como un infante en esos temas de sexualidad, que sólo podía cerrar sus ojos con fuerza dejándose guiar por el otro.
- Freddy.. -Le susurraba en el oído solo por tratar de encenderle un poco más, sus manos se situaron en la camiseta del otro, abriéndola con fuerza logrando que los botones de ésta salieran volando por allí, su fin era acariciar el pecho lampiño y suave del otro, y aprovechaba igual de desnudarle, diciéndole también que el le desnudara de igual forma.
Al estar ambos en cueros, se echaron en la cama para proseguir con lo suyo, la diestra del Toy, fue acariciando desde el pecho hasta el ombligo ajeno, acercándose a sus pequeños botoncitos rosados y comenzar a lamerlos con fiereza, provocando que el oso soltara sonidos indecentes que solo aumentaban los deseos indecorosos de su amante, con sus dientes pellizcó suavemente el otro botoncito, dejando ambos duros e hinchados, verlos daba cierta ternura, la mano continuó su recorrido atrapando el miembro envuelto en la tela del bóxer de su acompañante, apretándolo y meciéndolo para ponerlo duro.
-Gah... N-no... -Sus protestas no eran ciertas, pero, sabia que si se hacia el difícil le gustaría aún más al otro, quizás era algo masoquista, y como predijo sucedió, el oso hizo caso omiso a sus palabras y bajó su ropa interior dejando al aire su hombría, acto seguido se comenzó a estimular con suavidad, aumentando el ritmo según subían de tono los gemidos que salían de su boca.- A-ah...~
Toy Freddy se mordió el labio al ver las reacciones de quien estaba debajo suyo, era tan excitante, su manera seductora y tierna le volvía loco, su manos agitó con mas velocidad, logrando así que el otro se corriera en un instante, ambos estaban ansiosos, tanto qué al verse húmedos sus dedos los llevó a la entrada del contrario para abrir un poco su apretado ano, y vaya que estaba estrecho, apenas si lograron entrar sus dos dedos en el.
- Joder Freddy... Qué, apretado. -Se quejó, pero por otra parte se alegraba de ser el primero en esos lares, sus dedos se movían con agilidad dentrando y saliendo en la entrada del oso, simulando embestidas que eran placentas, según podía ver y escuchar en los gestos de profunda excitación del otro.
- Me-metela de una vez... -Pidió Freddy con su voz algo entre cortada, realmente necesitaba al otro dentro en ese mismo instante, y por su parte Toy Freddy no tuvo problema alguno, se retiraron los dedos para poner en marcha la verdadera máquina, acoplándose al instante en el interior del chico.- ¡G-Gahh!
Sintió una punzada desde su culo hasta la columna, le dolió, pero algo le decía que pasaría en cualquier momento, solo cerró una vez más sus ojos dejando que se acostumbrara a la polla dentro de el, y movió sus caderas un poquito, pidiéndolo al oso que podía moverse cuando le plazca.
Inició de manera relajada, elevando apenas al oso debajo de el, su miembro apenas alcanzaba un poco más adentro, pero debía de moverse mas rápido si quería lograrlo, Freddy se abrazó del cuello de Toy para encontrar un apoyo a ese dolor/excitación que sentía, sus ojos cristalizados se fijaron en un punto específico del techo. Toy Freddy comenzó a ir mucho más rápido, haciendo abrir como platos los ojos del castaño, soltando un largo gemido después de eso, sus sonidos eran más prolongados y sonoros, excitando de sobremanera al de mechones claros, quien no se detenía en ese salvaje movimiento de caderas que hacían una deliciosa fricción con el culo de su contraparte. Freddy se sentía en su punto de que ya no aguantaría mucho, y acabó por correrse en el abdomen de ambos osos.
- Fre-Freddy~♥ -No distanció mucho de tiempo con su sumiso, solo faltaron minutos para que el Toy se corriera en su interior, sintiéndose recorrer aquel líquido caliente en su dentror, se separaron, y acurrucaron juntos, escuchando sus respiraciones alineadas, observándose antes de caer dormidos.
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Ahsjjdjfjndkfdjkdksksks♪
Al fin, terminé el lemmon hijo de su mami limona, gg.
Me quedó del hortooo lo ć.
