Sombras del pasado

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Se que tengo que olvidar, y lo intento, trato de hacerlo. Hago todo lo posible por mantenerme ocupada y evitar que mi mente tenga la oportunidad de recordar todo.

Camino por las calles con los auriculares puestos y la música a todo volumen. Gracias a Dios que existe la música.

Y te preguntarás, ¿Qué escuchará? Pues...de todo, Music play en aleatorio es lo más loco que puedes hacer, hasta que llega esa canción en la cual le das repetir una y otra vez, no porque te guste, sino porque te identificas con ella.

Magdalena Martínez dijo:
"La música es el arte más directo, entra por el oído y va al corazón"

Cierto, pero y la adoración?
La adoración sale de nuestro corazón para tocar el corazón de Dios, haciendo que ambos se conecten y creen una perfecta sintonía.

Sintonía que desaparece siempre que recuerdo el pasado. Se que no debería hacerlo, pero qué hago? Cuando cae la noche y pongo mi cabeza en la almohada mis pensamientos viajan y llegan a esa estación.

Oro y pido a Dios que renueve todo en mi, que sane mi corazón, pero en el fondo sigo destruida.

Siempre me dicen que el tiempo pasará y todo quedará en el pasado. Lo sé, pero cuándo vendrá ese momento?

Ya no quiero pensar en eso, no quiero volver ahí. Mi única salida es Dios, pero la culpa me impide llegar ahí.

Padre! Quiero tocar tu corazón, pero como lo hago si el mío esta roto?

Quiero volver a brillar, ser esa lámpara que emite tu luz, pero como lo hago si aún vivo en las sombras del pasado.

Ese pasado que me atormenta, no me deja ser yo misma. Aún cuando todos ven mi sonrisa y mi alegría detrás de esa máscara está la verdadera "yo" que en realidad no es real.

Esta es mi nueva yo, una chica que a pesar de todo lo que ha pasado se mantiene de pie, demostrando lo mejor de si misma para no dejar que aquellos vean su debilidad.

Una chica que lucha constantemente con los recuerdos del pasado e intenta avanzar hacia el futuro, superar los obstáculos que se les atraviesa en el camino.

Intento verlo todo desde un punto de vista optimista y no pesimista.

Últimamente me miro al espejo y me digo a mi misma "Eres fuerte Carol", y se lo agradezco a Dios. Él es el único que me las puede dar para poder seguir el camino.

Solo tengo algo que superar, y ya lo he repetido miles de veces, el pasado y la culpa.

No sé que más hacer. La vergüenza me impide mirar tus ojos, esos ojos de amor que siempre me miran sin juzgarme.

Cuánto deseo un abrazo tuyo, sentirte en carne y hueso para poder sentirlo, pero solo me siento en el suelo y me abrazo a mi misma con mis rodillas al pecho mientras lloro.

Podría hacer un río con mis lágrimas. Quién sabe y todo un mar, pero de seguro que en él no nadaré.

Aún así cada día despierto animada, "Hoy todo será distinto" me lo repito una y otra vez, hasta que vuelve a llegar la noche.

Quiero dormir!!! Quiero descansar!!! Pero estos dos compañeros míos no me dejan.

- Y si dejas de amar?- dice cerebro.

- No! Ni se te ocurra!- ahí responde corazón- Y si dejas de pensar tanto?

- Y si me dejan dormir?!- reclamo yo, cansada de la misma lucha.

Mejor me pongo a orar, a ver si puedo controlarlos a ambos. Esa es la mejor forma de lidiar con todo, la oración.

La oración mueve la mano de Dios, y esa mano es la que me sacará de mi tormenta.

En el corazón de una CristianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora