30: Especial Jennie

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Soy Jennie y no, mi vida no fue tan interesante como en realidad esperas.

En mi cumpleaños número 12, mis padres prometieron llevarme a comprar un gran pastel de helado que habia visto en una revista días antes y habia pedido como único regalo. Mis padres no eran personas de mucho dinero, ambos habian escapado de sus casas y me habían tenido siendo bastante jovenes, sin embargo siempre de las ingeniaban para regalarme lo que yo pidiera.

No pienso hacer esta historia algo largo y tragico que los haga sentir pena por mi, no la necesito ni la merezco. En el camino a la heladeria unos policias dispararon a nuestro auto "por error", mis padres murieron en el ataque y yo solo tuve una herida cerca del hombro. Ya que fue un error por parte de una organización del gobierno recibí una gran indemnización que podría cobrar al ser mayor de edad, y para ocultar su "error", me enviaron a una casa hogar sin siquiera buscar a algún familiar que pudiera cuidar de mi.

Ni un "lo siento por matar a tus padres" o algo por el estilo. Se deshicieron de mi tan rápido como se deshicieron de mis padres.

Mentiría si dijera que sufrí mucho por la muerte de mis padres. Siempre tuve problemas para tener apego por las personas, incluso por mis padres. Ciertamente los extrañé y deseaba pasar tiempo con ellos de nuevo, pero en todo ese tiempo no solté ni una lagrima.

Recuerdo las palabras de un policia.

"Ni siquiera llora porque matamos a sus padres, ¿porque deberiamos recompensarla por eso? Seguro que se alegra"

Lo que me alegra es saber que fue despedido después de eso.

Recuerdo el día en que llegué a la casa hogar. Estaba encantada con los grandes patios del lugar. Cuando entré a una de las habitaciones de descanso muchos niños se acercaron a mi, hablando demasiado rapido y fuerte, din dejarme decir ni una palabra. No quería ser una idiota con ellos pero tampoco quería tenerlos cerca, las personas así me estresaban de sobremanera.

Entre todos los niños que me rodeaban pude ver a una niña, alejada de todos, sentada en una esquina con una hoja medio coloreada sobre sus piernas. Se veía frustrada. Me alejé como pude de todos los niños y me acerqué de a poco a la niña, hasta estar parada a su lado. Estaba llenando la hoja con un crayón negro.

-Porque llenas la hoja de negro? No es un color un poco trise? - Dije intentando tener una conversación con ella.

-Si vienes a molestarme mejor vete- me cortó molesta. Levanté una ceja confundida. ¿Molestarla? ¿Porqué lo haría si no la conocía?

-¿Porque te molestaría?

-Porque no soy coreana, soy rara, no dibujo con muchos colores, soy fea y muy alta. Eso dicen todos- dijo mirando fijamente la hoja entre sus manos. La miré curiosa y me senté a su lado.

-No eres fea y no encuentro nada de malo en lo demás que dijiste- dije sinceramente. ¿De verdad los demás eran tan infantiles como para molestarla por algo así? ni siquiera era fea, era realmente linda y definitivamente resaltaría en una habitación con todas las demás niñas.

Los demás me miraban con sorpresa he incluso diría, con recelo. ¿Tanto les dolía que no los escogiera?

Escuché a alguien decir "es igual de rara" y todos se alejaron solo asintiendo.

Tenia 12 pero eso no me hacía estupida, sabia que eran falsos y mentirosos.

-Ahora los demás van a molestarte por hablarme- me miró como si estuviera disculpandose por algo y negué

-Prefiero hablar con la chica rara que con esos niños de mente cerrada- por no decir "idiotas"

-Soy Lisa- dijo sonriendo por primera vez. Tenia una sonrisa muy contagiosa.

El sonido del silencio (Chaelisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora