Cielo Infernal

Prólogo (Visión)

Un hombre y una mujer se encontraban caminando de un lado a otro. La mujer con un notable estómago abultado se veía más nerviosa.
-Vamos, Jerome.. Creí que habías dejado eso atrás.

Dijo la suave voz femenina.

-Yo lo olvidé,lo juro.
Pero hace un momento al tocar tu estómago tuve la visión.
Ese niño que llevas en el vientre completará el triángulo que dará nacimiento a los elegidos. Y no solo eso. Él se convertirá en el ser más poderoso de este mundo.

Dijo la voz del hombre entre nerviosa,eufórica y un tono difícil de identificar.
-Se que tus visiones no fallan.
Se que antes estuviste buscando esto.. Pero el que tus hijos sean los elegidos no debería hacerte perder el camino.
Júramelo Jerome,júrame que no perderás el camino!!-

La voz de la mujer temblaba,y lágrimas comenzaban a salir de sus ojos..
El hombre se acercó y abrazo a la mujer.

-Como crees mujer.
Yo no perderé el camino. Debo ser fuerte para guiar a mis niños. Para guiar a este niño que viene en camino. Ambos debemos ser fuertes,margarita!

La voz del hombre ahora sonaba más calmada y sus orbes habían regresado a su lugar.
Ambos suspiraron.
Miraban por la ventana viendo a sus otros dos hijos jugar.
Margarita se veía más calmada.
Por lo que Jerome no quiso decirle el resto de la visión.
Literal había visto pasar sus vidas delante de sus ojos.
¿Cómo decirle a su querida esposa que ellos estaban destinados a morir y que sus amados hijos sufrirían como ningún otro ser?
Sobretodo su hijo que aún no respiraba el aire de este mundo y ya estaba condenado.

Claro que no podía decirle eso a su margarita.
Tomo una libreta y en ella escribió su visión en forma de profecía..

(El mundo será devorado por la mancha negra. Los guerreros del clan de luz perderán.
Toda esperanza estaba perdida.
Pero la mancha negra no sabía que el pico más alto de la estrella brillaría enormemente que terminaría absorbiendola..
Así acabaría el primer arco.
Un arco de flores que daría paso a una nueva dualidad)
Se sentía impotente de no poder escribir las cosas como las había visto. Pero el hacer eso es lo que quizá llevaría a la realidad esa visión.
Quizá cambiaría todo para mal.

Jerome suspiro. Guardo su libreta y salió por la puerta.
Estaba decido a aprovechar esos últimos instantes que tenía con su querida familia.
Igual las visiones suelen cambiar de rumbo.
En el mejor de los casos él y margarita no morirían y sus hijos no estarían destinados a sufrir..

Eduardo. Se que cuidarás de mi niño...
Disculpa por no estar ahí para ti.
Fue lo último que pensó antes de acercarse a su familia y sonreír para no preocupar a ninguno.