Cielo Infernal

Fragmento 1(Primer encuentro)

Muchas personas pasan la mayor parte de su vida cuestionando su existencia.
¿Hay un motivo por el que nací?
Era la pregunta más constante.
Algunos nacían y vivían más cómodamente que otros.
Así era la vida.
La vida también es muy curiosa.
Un día estabas acostando en tu cama aburrido,y en tan solo un segundo estabas en una situación completamente diferente..
De cualquier manera puede que nada estuviera escrito,o quizá era un juego macabro solamente...
°El aire era caliente,había escombros y cuerpos sin vida tirados en todas partes.
Un niño de no más de 12 años corría como si su vida dependiera de ello,y es que a decir verdad si vida si dependía de eso. No solo su vida,también la de sus pequeños hermanos.
En su espalda llevaba consigo a una pequeña niña,y en sus brazos llevaba a un niño a un más pequeño.
El niño estaba herido y aún así corría velozmente. Es lo único que podía hacer después de que "ellos" se hubiera sacrificado por él y sus hermanos.
Era lo que pensaba en muchachito.
Una fuerte llamarada color rojo intenso iba directo hacia él. Con una mano abrió un portal cruzando por el, alejándose del peligro y de su amado hogar.
El portal se había abierto a dos metros de altura del suelo.
Ahí estaba esa sensacional de caída y entonces.....°

Un joven sudoroso y sobresaltado abrió los ojos de golpe. Su corazón latía más rápido de lo normal. *De nuevo esos sueños*,pensó mientras se levantaba de la cama. No necesitaba ver el reloj para saber la hora.. 6:30AM,ya hace unas semanas se había hecho costumbre,desde que comenzó a a tener esos sueños..
Se vistió y salió de su habitación,todos en el orfanato dormían aún. Se dirigió a la cocina y se preparó algo de comer. Le hubiese gustado hacer la comida para los niños,pero el director se lo había prohibido,le decía que debía concentrar su mente en sus estudios.
A pesar de eso él hacía todas las cosas que pudiera ya que no le gustaba quedarse quieto y sentir ese terrible aburrimiento..
Cuando acabo de comer lavó las cosas que había utilizado y salió de la cocina regresando a su habitación. Tomaría una ducha antes de ir al colegio.
Pasada media hora salió del orfanato dando los buenos días al director que acababa de salir de su habitación. En su trayecto a la escuela pensaba en que debían podar el césped y dar mejor mantenimiento a las flores del jardín. Jun pensaba que su vida era aburrida,pero eso no quitaba que fuera un poco rara.
A veces oía las voces de alguien cada que regaba las plantas.
*Quizá el aburrimiento ya me está volviendo loco*
Fue lo último que pensó antes de entrar al colegio..

El colegio no era el lugar más divertido.
De hecho se parecía al orfanato en cierto aspecto. La diferencia es que en el orfanato jun tenía a sus hermanitos y a su padre. Antonio,el director.
Aunque no le había dicho nada Antonio,jun lo veía como un padre.
En el colegio no tenía amigos así que las horas se le pasaban muy lentas,o eso creía ya que cuando menos se dió cuenta ya era la hora de salida.
Iba distraído,pensaba en si de verdad esos enormes árboles le cantaban al viento.
¿Los árboles cantan?
Tan absorto iba que no vio a las personas que iban directo hacia él.
Un sonido seco fue lo único que se escuchó. Jun se encontraba en el piso.
-Estas bien?-
Escuchó la voz de un hombre tan gentil y al mismo tiempo potente y varonil.
Levanto un poco el rostro y vio a dos personas.
Un hombre y una mujer..
*WoW*, pensó en sus adentros.
Nunca había visto a personas así.
Eran características muy extrañas.
El hombre era tan alto,o eso le pareció. Ya que comparado con su propia estatura cualquier persona era alta. Incluso la linda mujer que iba con el hombre.
No sabía que decir,estaba impactado con esos dos individuos. Ambos eran hermosos.
El hombre llevaba una cabellera perfectamente peinada,cabello color rubio claro,casi se veía blanco,ojos color miel y repasando su estatura fácilmente medía más de 1:80cm.
La mujer llevaba un cabello muy largo peinado en una trenza en la parte trasera.  Sus ojos eran de un hermoso color azul y su cabello de color gris oscuro.
-Si!!,yo estoy bien- dijo jun después de unos minutos.
-Me alegro mucho- Le respondió el hombre ahora más relajado y con una sonrisa.

-Deberías de tener más cuidado- Le dijo la mujer con una voz algo irritada.
-Yo tendré cuidado,señorita-
Respondió acomodándose la ropa y retomando su camino
-No crees que fuiste algo ruda?-

-No,no lo creo-

-Bueno,después de todo veremos mucho a ese pequeñin,jajajaja.
Se parece mucho a papá,de bebé tenía un rostro más fino,como el de mamá- El hombre parecía feliz.

-Pues yo pienso que no se parece a ninguno de nosotros -...

Jun llegó al orfanato. Entro chocando ahora con Antonio. -Papá,una disculpa no te ví-
Antonio lo miro sorprendido,en todos esos años jun no había mostrando un cariño especial hacía él,y que le llamará papá era sorpresivo.
Aún así no comento nada al respecto.
-No te preocupes,por cierto.
No es que quiera controlar tu tiempo y eso,pero cuando vayas a llegar tarde, trata de avisar-
Jun miro su reloj y se dió cuenta de la hora. 4:23pm.
*Tanto tiempo había platicado con aquellas personas?,pero si no dijeron muchas palabras* pensó jun.
-Lo siento director,es que choqué con unas personas y me quedé platicando con ellos.

-¿Desconocidos?-, preguntó Antonio suspirando un poco.
-No deberías platicar con desconocidos, nunca se sabe con que clase de gente te encontrarás -
Dijo mientras entraba a la estancia.

Jun se quedó en el patio, miró al cielo viendo las nubes rojas. Aún no era tan tarde y el sol ya se estaba poniendo..
°Puede que el infierno este allá arriba y la tierra sea nuestro paraíso. Los demonios a veces lucen tan angelicales y hay ángeles que lucen escalofriantes.
Lo mismo con puede aplicar con el hermoso cielo azul.
Puede que sea un infierno,un cielo infernal°...
De niño jun imaginaba mundos fantasticos. Las palabras de Antonio le daban miedo aunque nunca había entendido bien su significado.
Hace mucho no recordaba esas palabras.
Aunque el director no se las había dicho tal cual. Recordó esas palabras que hace tiempo le hacían tener pesadillas y desconfiar de la gente.
Dió una última mirada a las rojas nubes y entro a la estancia..

En su habitación, Antonio estaba sentado en su cama con una manta en sus manos.
En la manta se podía leer el nombre de "Jun"
Una carta también estaba entre la manta el día que encontró a jun.
Nunca le había dicho nada al joven.
Al principio creía que era una broma.
Pero entre más leía la carta,más convincente sonaba todo eso.
Tenía miedo,claro que si.
Aún así estaba dispuesto a proteger a su hijo.
Y si no diciéndole nada lo protegería. Entonces eso haría.
Guardaría silencio hasta el día de su muerte....

Ya era de noche y jun se encontraba en su habitación.
Ya había cenado y había acabado sus deberes.
No dejaba de pensar en aquellas personas.
A decir verdad no parecían malos.
Pero como decía su padre. " A veces los demonios lucen angelicales"
Sin dar más vueltas a las cosas cerro los ojos y un sueño profundo se apoderó de él....
Jun no sabía que quizá debió abrazar más esa vida aburrida y decirle a Antonio cuanto lo quería.
Quizá jugar más con sus hermanitos.

La rueda del destino empezaba a girar nuevamente......