Cinéfilo (Taekook)

CAPITULO 3. "¡No es mi culpa que estés enamorado de mí o algo así!

Taehyung reparte el resto de los mapas mientras se van alejando las voces del otro grupo. Después lo seguimos, obedientes, al otro lado del lobby, atravesamos un arco identificado como "Fallen Angel" y cambiamos la parte fría del lobby por el extremo calor y la humedad de la mansión.

Siento que debería estar disfrutando esta parte de la orientación, pero estoy tan nervioso por el hecho de que Taehyung me haya reconocido que no estoy prestando atención a lo que hay a mi alrededor. Quiero quedarme atrás y alejarme de él, pero solo somos unas quince personas, y Jimin me arrastra alegremente del brazo hacia adelante. Ahora estamos hablando justo detrás de él, tan cerca, que quizás piense que estamos adorando su trasero, que está muy bonito, para ser sincero.

—El Fallen Angel tiene cuarenta y dos salas, o sea, es la cueva más grande del mundo hecha por el hombre —explica Taehyung mientras se detiene en el medio de un recibidor lleno de cosas relacionadas con los trenes: señales, vías y asientos de vagones de primera clase de la era Victoriana con almohadas de terciopelo. En el fondo de la sala hay incluso una boleteria vieja de Seúl que parece haber sido transformada en bar.

—Nuestro querido y loco millonario amaba cazar, los juegos de apuestas, los ferrocarriles, el alcohol y los piratas —dice Taehyung—. Más que nada, los piratas. Pero... a quién no le gustan los piratas, ¿no?

Bueno, sí, el chico tiene cierto encanto. No soy inmune al encanto. Y mientras habla me doy cuenta que tiene un tono de voz áspero y grave que parece el de un actor que hace la voz en off en videojuegos: calmado, pero también seguro. Dios, debe de ser tan creído.

¿Y por qué nos esta haciendo esta visita guiada? Pensaba que los guardias de seguridad tenían que estar parados por ahí esperando para gritarle a algún mocoso baboso que este tocando los cuadros con sus manos mugrientas.

Cuando vamos al área siguiente, me entero por qué.

—Esta es la sala de las máquinas traga monedas —dice Taehyung, caminando hacia atrás. En la sala hay un laberinto de mesas, a las que la gente se puede sentar a jugar con alguna de las cien máquinas traga monedas de mesa antiguas, todas distintas. Parece que las menos comunes están acordonadas, Taehyung se detiene y dice:

—A este punto, se estarán preguntando que si todas la salas llevan el nombre de lo que contienen. Y la respuesta es que sí. Los dueños del museo no son creativos, a menos que se trate de sacar provecho de los empleados, para lo que sí son sumamente creativos. Fíjense en mi trabajo, por ejemplo. ¿Para que pagarle a un gerente de servicio al cliente para que se encargue de los problemas con los visitantes si se puede enviar al equipo de seguridad? Ya verán pronto que al indomable señor Kimchi... perdón, señor Kim —con eso saca algunas risas-, le gusta que todos puedan hacer cualquier trabajo, por si tienen que reemplazar a alguien. Así que no se pongan cómodos, porque es posible que ustedes también den una visita guiada a la próxima tanda de empleados nuevos dentro de un par de semanas. Les conviene memorizar el mapa que les di, y rápido.

Uf, genial. No me gusta como suena esto. Quizás todavía estoy a tiempo de presentarme en ese trabajo para limpiar vómitos de algodón de azúcar que mencionó Jimin.

Durante más o menos media hora, Taehyung nos lleva volando por las salas de esta ala. Las salas tienen: momias falsas (Sala de momias), artículos de medicina extraños de la era Victoriana (Sala de artículos de Medicina) y peceras de pared (Sala de Peceras). Hay incluso una colección de rarezas de atracciones de feria dentro de una gigantesca carpa de circo. Este lugar te abruma los sentidos y todo se está convirtiendo en un gran borrón, porque no tiene relación alguna con la distribución de la mansión, y está lleno de curvas, recovecos, escaleras escondidas y salas ocultas detrás de hogares a leña. Si yo estuviera visitando el museo y me sobrarán unas cuentas horas, estaría encantado. Pero saber que tengo que memorizarlo todo, es un dolor de cabeza.