III - Aery

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Aery. Un nombre que nunca había escuchado, y sin embargo, se me hacía familiar. Como un recuerdo lejano, el nombre estaba presente en mi memoria, borroso e incierto, pero al mismo tiempo, cálido y gentil. Tras decir su nombre, pude escuchar a Aery seguir tarareando su canción, tenía tantas dudas en ese momento, ¿Por qué apareció? ¿Quién es? ¿Por qué justo ahora?

Y aun con todo ese cúmulo de preguntas, no era capaz de hacer ninguna de ellas. Solo quería permanecer justo así, en esa completa aura de tranquilidad que me envolvía al saber que ella estaba cerca. No sabía ella cómo era capaz de hacerlo, de hacerme estar tan relajado y tranquilo como si todo fuera inexistente, y lo único que estuviera en este sitio fuéramos nosotros dos, flotando en la nada.

- ¿Hoy fue un buen día? – Pregunta Aery con curiosidad

- Pues, no fue malo. Solo fue un día normal. – Respondo con cierta incertidumbre.

- Ya veo, sé que has tenido algunos días verdaderamente desgarradores, una persona no debería sufrir nada de eso, independientemente de quien sea. – Dice Aery mientras acaricia mi cabello.

- Espera... ¿Qué tanto sabes? – Pregunto con algo de ansiedad

- Lo suficiente, pero es mejor no hablar de ello. – Responde Aery mientras trata de calmarme al sentir la ansiedad en mi voz.

Soltando un suspiro, vuelvo a relajarme poco a poco mientras empiezo a morder sutilmente las puntas de mis dedos. Era algo que solía hacer por la propia ansiedad, y aunque esta vez no la sentía, era algo que se hizo una costumbre de tanto repetirlo. Había un sinfín de cosas que pasaban por mi mente en esos momentos de ansiedad, tantos pensamientos y acciones que no llevan a nada. Como una especie de laberinto de ideas, muchas no llevan a ningún sitio y otras parecer formar un camino para luego estar en un callejón sin salida.

Puedo sentir como Aery está a mi lado, siento que me mira, aunque es algo incierto ya que no puedo abrir los ojos, lo cual me hace tener otra pregunta. ¿Por qué no puedo hacerlo? ¿Es un sueño, cierto? En otros sueños puedo hacerlo normalmente, ¿Por qué esta vez no puedo?

- Aery, ¿Por qué no puedo ver? – Pregunto con duda

- Pues, es algo obvio, tienes los ojos cerrados. – Responde Aery mientras comienza a reír.

A pesar de ser un chiste tan malo, no puedo evitar sonreír un poco con ella por la vergüenza.

- Lo siento, pero en realidad es algo que no puedo responder. – Dice Aery después de reír, con un tono más serio.

- ¿Al menos podré saberlo algún día? – Vuelvo a preguntar

- En algún momento lo sabrás, pero hasta entonces, solo relájate y no sobrepienses, es algo que sueles hacer a menudo. Solo trata de relajarte estando aquí. – Responde Aery.


Tras esas palabras, respiro profundamente para luego soltar un suspiro de alivio. Aunque eran palabras simples y aun tenia algunas preguntas, me sentía en la confianza como para creer en su palabra y solo relajarme como ella lo decía. Era algo que solía hacer poco, ya que mi propia mente me lo impedía al ahogarse en sus propios pensamientos.

Estar en ese sitio era algo incierto, como si el tiempo no transcurriera, no hacía frio y tampoco hacía calor. Al principio pensaba que era mi propia habitación, pero hay cosas que no están en el lugar que deberían. Aun así, era un sitio del cual no quisiera irme pronto.

- Aery, ¿Fue una casualidad que aparecieras cuando había decidido rendirme? – Pregunto con un tono más apagado de lo habitual

- Nada en esta vida es una casualidad. – Responde Aery – Pude haber aparecido antes, o pude haber aparecido después.

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⏰ Última actualización: Jul 11, 2022 ⏰

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