Capítulo 3

770 69 41
                                    

01:00 a.m.

Freddy verificó la hora en su interfaz, para su alivio los trillizos seguían profundamente dormidos. El oso no quería admitirle a _____ que estaba preocupado por ellos.

El animatrónico sabía que sus hijos no iban a permanecer como unos niños para siempre, al igual que Gregory, ellos crecerían y se relacionarían con otros niños para llevar una vida normal. Pero los niños son curiosos, por lo que en algún momento no dejarían de preguntar sobre su padre y la excusa de "volverá pronto" perderá efecto en los trillizos.

_____ y él nunca habían hablado sobre el tema, pues _____ lucía más preocupada porque alguien descubriera su atroz pasado en lugar de pensar en el futuro de sus hijos. Y no, Freddy no quería reclamarle nada, entendía un poco el punto de vista de su supernova. Gracias al acceso que tenía al internet, Freddy sabía que existían humanos crueles que solo buscaban esparcir el mal a gente inocente. El oso no comprendía esas acciones, ¿acaso esas personas no eran felices y por eso deseaban que los demás no lo fueran? Tal vez esa pregunta nunca le sería resuelta.

Sin embargo, por eso no quería presionar a _____, Freddy no quería agobiarla más de lo que ya estaba. Seguro no era nada fácil para ella ser una madre soltera a la vista de los demás humanos, sería demasiado si ellos se enteraban que tuvo una relación con un robot. ¿Cómo la verían? ¿La juzgarían? ¿Intentarían lastimarla a ella y a sus hijos? Freddy deseaba no imaginárselo.

Su supernova y sus pequeñas superstars lo eran todo para él. Si algo malo llegaba a pasarles, era seguro que Freddy se reprogramaría o apagaría por siempre al no haberse sentido útil para lograr salvarlos.

El oso despejó sus pensamientos luego de escuchar toques en la puerta de su habitación. Con rapidez se levantó de la silla que estaba frente a su mesa de tocador, lo mejor era atender al llamado antes de que el sonido contra la puerta perdurara e interrumpiera el sueño de sus hijos.

Sin embargo, era extraño. Freddy nunca recibía visita de nadie durante las horas de cierre, por lo general, sus amigos preferían explorar todo el Mega Pizzaplex o acudir a las áreas dedicadas a ellos. _____ y Vanessa no podían ser, pues ellas portan las tarjetas de acceso, así que no tienen la necesidad de tocar las puertas.

Pero al parecer, Freddy estuvo equivocado dado que del otro lado de la puerta se hallaban tres de sus amigos. Roxy y Monty mantenían una mirada de seriedad mientras que Chica lucía preocupada.

—Freddy, tenemos que hablar contigo —habló la loba en un tono de autoridad.

—¿Tiene que ser ahora? —cuestionó el oso, volteó un momento hacia el gran sofá solo para encontrar a sus hijos todavía dormidos.

—Sí, lo que tenemos que decir es serio, Fazbear —respondió Monty. El caimán negaría frente a cualquiera que le interesaba muy poco el asunto, cuando en realidad él disfrutaba de los "chismes".

—Freddy, por favor, hablemos ¿sí? —esta vez fue Chica quién hablo. La pajarita era la más amorosa en comparación de Roxy y Monty.

El oso pareció dudar, sin embargo, al final no tendría nada que perder si hablaba con sus amigos. Ellos no tenían ningún motivo para dañarlo, mucho menos a _____ y a los trillizos.

—De acuerdo, pero no podemos hablar en mi habitación.

—¿Por qué no?

Freddy tuvo que hacerse a un lado para permitirle a sus amigos una mejor vista del interior de la habitación. Cuando ellos vieron a los trillizos durmiendo cómodamente sobre el gran sofá, entendieron la petición del oso.

The Bear Family | Glamrock Freddy x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora