Capítulo IV

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"El cuento del tío"

Los chicos estaban anonadados, no sabía si no les creían o no podían procesar la situación, quizás algo de ambas cosas

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Los chicos estaban anonadados, no sabía si no les creían o no podían procesar la situación, quizás algo de ambas cosas.

Entramos a la residencia y un montón de caras desconocidas nos recibieron, todos de nuestra edad o cercana a ella, cada uno haciendo sus cosas, el lugar era hermoso, estábamos en la entrada, tenía un sillón, una televisión, un ascensor y escaleras; la cocina era grande, con una isla y un comedor.

─¿Chicos nos dejan con los nuevos? ─ le habló Paz al resto de las personas en la habitación.

─ Ey, ¿ustedes dos están borrachas? nosotros no somos los nuevos ─ dijo Tacho desde el segundo piso.

─ ¡No!, el delirio, se me fue de las manos ─ gritaba Simón.

Todo estaba demasiado alborotado, nadie entendía nada, y cada vez se perdían más.

Paz y Esperanza le pusieron un video de una chica llamada cielo, que tenía el mismo rostro que Paz, en el cual intentaba calmarlos y resolverle sus dudas. Eran viajeros del tiempo, del pasado, de hace 22 años exactamente, ella les decía que debían confiar en las dos hermanas y que debían cumplir una misión. Pero ellos no les creyeron, se pusieron a la defensiva, estaban dolidos y confundidos.

─ Se que no es el momento de preguntar esto ─ dije tratando de ser lo más amable posible luego de que todos se fueron de la sala ─ pero, ¿no lo vieron a tictac?

Ambas negaron con la cabeza y caminaron hacia la puerta de entrada, estaban tristes, ellos no les creían y ellas los habían recibido muy calidamente, quizás con otras expectativas del reencuentro, o del encuentro dependiendo el punto de vista.

En esos momentos me hubiera gustado tener un video que me resolviera al menos una duda, estaba sola y el único que podía resolver mis dudas no se presentaba.

─ Tic Tac yo sé que vas a aparecer en algún momento, pero te necesito ahora ─ lo extrañaba, aparte de mi mamá era la única persona que me hacía sentir segura y me brindaba tranquilidad y eso era algo que necesitaba con todas mis fuerzas.

─ Tic Tac yo sé que vas a aparecer en algún momento, pero te necesito ahora ─ lo extrañaba, aparte de mi mamá era la única persona que me hacía sentir segura y me brindaba tranquilidad y eso era algo que necesitaba con todas mis fuerzas

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Esperanza me guió hasta las que iban a ser nuestras habitaciones, los chicos aparecieron cautelosamente detrás nuestro.

─ ¿qué le hicieron a nuestra casa?─ preguntó Mar.

─ Bueno... técnicamente hablando no es más nuestra casa ─ aclaró Hope.

─ Dale Hoppie contá que le hicieron a nuestra casa ─ dijo Rama, por lo que ella lo abrazó, pero la novia de éste al instante la alejó.

Tefi entró a una habitación y gritó, yo me asomé para ver que lo causó , había varios chicos cambiándose, por lo que Hope cerró la puerta y se disculpó por no decirles que ese ahora era el cuarto de los varones.

Nuestro cuarto era muy bonito, tenía tres cuchetas, todas las pertenencias de las chicas y todo era demasiado rosa.

─Chicas, no hay tiempo, vayan a bañarse ─ dijo Hope entrando a la habitación.

Todos en el baño mirábamos a Esperanza.

─ ¡Okey! es el bardo del baño, el momento en que todos hacen lío─ nadie la contestaba ─bueno, si le ponemos onda, tal vez funcione.

─ ¿Y si te pego una piña?¿Tal vez? ─dijo irónica Mar.

─ ¡Claro!, si, piña acá, piña allá, jabón, shampoo...──empezó a tratar de animar.

Esperanza le tiró talco a Thiago,

─¿Qué hacés tarada? te voy a matar ─ gritó la morocha en defensa de su novio y saltó encima de Hope, todos por atrás quisieron ir a detenerla, pero terminamos llenos de talco todos

Empezamos a tirar lo que veíamos, talco, toallas, jabón y el tan preciado "bardo del baño", como le decía Hope pasó, todos nos reíamos por el aspecto desastroso del otro y así el ambiente se destenzó.

Solo teníamos cinco minutos para bañarnos, suponía que lo necesario, quizás un poco menos pero ahorrábamos mucha agua, al salir me envolví en un toallón que me pasó Jaz y fui directo al cuarto, en donde nos dejaron nuestros uniformes, entre los tres colores que había, naranja, celeste y verde, me había tocado el último y no me desagradaba.

Solo teníamos cinco minutos para bañarnos, suponía que lo necesario, quizás un poco menos pero ahorrábamos mucha agua, al salir me envolví en un toallón que me pasó Jaz y fui directo al cuarto, en donde nos dejaron nuestros uniformes, entre los tr...

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En la mañana tuvimos varias clases, matemática, química, geografía, chino, y lengua y literatura; por la tarde podíamos inscribirnos en cursos optativos, de los cuales me decidí por meditación acuática, el arte del tiro con arco y el circo en su máxima expresión. Pero como al día siguiente empezaba con las clases de la tarde había decidido salir a caminar, cuando me topé con la peluquería de Hope "no hay tal crisis".

Todas estaban ya dentro del local en una especie de ronda, pero no quería interrumpir.

─vení pasá Liebe, sentate acá ─ me invitó Vale.

"No hay tiempo decía tictac, pero no entendía por completo a qué se refería hasta el día en que viajé en el tiempo, hice el viaje más extraño de mi vida..."

─ chicas no hay lola, estamos en el futuro ─ dijo dándose por vencida Cari y reconociendo lo que as demás no querían reconocer.

─ Yo no quiero esto ─ manifestó triste Mar.

─ ¿se podrá volver? ─ preguntó Mel.

─ Es lo que hay ─ le respondió Jaz.

─ ¿Y qué es lo que hay? ─ inquirió Tefi

─ Nada chicas ─ respondió Vale ─ de todo lo que teníamos no quedó nada.

─ otra vez solos ─entristeció Mar al darse cuenta de eso─ tanto besar la lona y otra vez solos.

Estaban todas muy confundidas y tristes, no sabían qué esperar y qué no, yo por mi lado estaba igual, de nuevo sola, no me gustaba estarlo , lo odiaba y Tic tac aún no aparecía, realmente tenía miedo de no volver a verlo, aunque sea durante este viaje.

" Viajar es ir a un lugar en donde nadie te conoce, pero viajar a otro tiempo es llegar a un mundo en donde no existís. Uno no existe si no tiene a sus seres queridos cerca, esa mirada familiar que te dice, estás en casa.

La vida es un cuento, y en ese cuento el tiempo es un personaje central, no importa si es pasado, presente o futuro, si hay mucho o poco tiempo, solo importa el tiempo que tenemos y lo que haremos con él. Pero además del desconcierto en ese tiempo nos esperaba algo más, una peligrosa misión, viajamos a un tiempo difícil, un tiempo de cambios, un tiempo peligroso.

El pasado, el presente y el futuro no son más que puntos en un camino que se recorre de ida y vuelta".

amor - Casi ángeles.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora