Love & Other Drugs [EunHae +18]

Capítulo 2

HyukJae se tiró a los brazos de ShinDong al llegar a casa, después de un día en el trabajo. Riendo, con su corazón latiendo de felicidad. Había superado a Siwon ¡Su proyecto iba a triunfar! Aquel medicamento que tanto tiempo le había costado crear, la única cosa que le importaba de verdad, estaba dando su fruto. 

-¡Siwon jódete! -Gritó por la ventana, mientras su hermano lo miraba como si fuera un loco. 

Dando vueltas sobre si mismo cual bailarina, se situó al lado de ShinDong y le rodeó los hombros con un brazo.- Nos vamos de fiesta.

Y así, esa noche, el azabache, su hermano, Nari, y KiBum llegaron a un local, donde bajo las incesantes luces, la gente bailaba con la música de bajo volumen, bebía, e incluso algunos, se enrollaban.

Se sentaron en una mesa, pidieron unas copas y rieron, al ver un sobrio y tan alegre HyukJae. Él les había invitado y eso era extraño.

-¿Qué te pasa, Hyuk?

-¿No puedo tener un detalle con mis amigos? 

-No. -Dijeron los tres a la vez. Él rió, sentándose, al lado de KiBum, frente a Nari y ShinDong. 

-He conseguido el puesto ¡Soy mejor que Choi! 

-Eso no te lo crees ni tú. -Aquella voz raspó sus oídos como lija. Se giró, viendo como su enemigo se encontraba vestido con traje, y sujetando una copa de whisky en su mano. 

-Oh, amigo. ¿Qué haces aquí? -KiBum tragó saliva, al ver las chispas que salían entre los dos.

-He venido con un amigo. -Miró más allá del alto, donde este le señaló, y vio al jefe de la empresa, hablando con una de las camareras.

-Tramposo. -Frunció el ceño un segundo, luego, con una sonrisa de encías, se levantó, arreglando su cabello.- Señor Park, que sorpresa encontrarlo aquí. 

-Maldito. -Murmuró Siwon, volviendo a su sitio, que ahora estaba ocupado por el azabache.

-Hola, Lee. -Saludó el jefe.

KiBum y Nari miraban, sorprendidos, como HyukJae sonreía, hablaba sin parar, y el jefe reía por las ocurrencias de este. Se notaba a kilómetros el enfado de Siwon, y aquello les hizo reír. El azabache no era una persona a la que le importaran las cosas, él siempre lo había dejado pasar si algo no le salía bien, pero eso de su trabajo, más específicamente su gran producto, aquello si le importaba de verdad. Y lo estaba dando todo por conseguir lo que quería. 

Pero era una pena, que eso fuera lo único verdaderamente importante para HyukJae.

-Nosotros también le importamos. -Susurró ShinDong.

-Lo sé. Nos tiene a nosotros y a ti, pero es que, no le importa nada más allá de la juerga y el trabajo. 

Los tres suspiraron, viendo como su amigo, una vez más, se ganaba la adoración del jefe, y el alto tenía que resistirse y no matarlo allí mismo.

*****

Llamó a la puerta, un ramo de flores y su mejor camisa. DongHae abrió, y sonrió al verlo, con una mueca perversa. 

-¿Son para mí? -Acarició las flores, las cogió y las puso en un jarrón, bajo la atenta mirada del mayor.

-¿Te gustan? 

-Mucho. 

Y se enredaron en un fogoso beso, lleno de saliva y lenguas. DongHae subió una pierna a sus caderas, enrollando sus brazos en el cuello del más alto. HyukJae, intentando llegar a la cama, se tropezó con la mesa, haciéndolos caer a los dos en el suelo del salón. Rieron, y sin más, continuaron con su labor.