Hoy conocí a un chico. Su nombre es Louis. Tiene unos ojos preciosos, y luce un tanto triste. Cuándo le pregunté por él a Niall, este frunció la nariz y me dijo que no me le acercase. Debo haber lucido un poco confundido, porque luego volvió a repetirme que me mantuviese alejado de él, pues era un «monstruo». Creo que tenemos concepciones diferentes acerca de la idea de esa palabra, ya que yo nunca me había imaginado a un monstruo tan bonito, ni tan inofensivo.