Despertó exaltado entre sudores fríos, no entendía qué pasó, dónde estaba, qué había sido ese sueño tan claro y lúcido que había tenido.
Mingi se incorporó de a poco hasta sentarse, se dió cuenta que estaba en su habitación, todo estaba en su lugar, pero no podía dejar de sentir aquél sueño en todo su ser. Juraría que lo vivió en carne propia pero su razón le decía que no podía ser así.
Como si fuera por inercia comenzó a llorar en silencio, las lágrimas brotaban sin control de sus ojos y su nariz moqueaba, pero él no emitía ningún sonido, estando en un claro estado de shock. ¿Qué fue ese sueño? ¿Por qué soñó eso? ¿Quiénes eran todas esas personas que le hablaron, que le gritaron? No conocía a nadie, solo parecían cadáveres, juraría que esas personas estaban muertas, podía verlo en sus ojos vacíos y negros, en sus pieles pálidas, eran almas, sollozantes que le pedían piedad y misericordia, le pedían que liberara sus almas para que ellos pudiesen-
...¿Pudiesen qué?...
Como si fuera una mala broma de su mente, mientras recordaba todo con rapidez, olvidó la otra parte de sueño. Pero aún podía sentir en su piel y su pecho el peso del dolor y oscuridad de aquellas almas. Aquellos muertos que en vida, sus almas quedaron enpenadas y les pedían liberación a él ¿Por qué a él?.
Su corazón latía con presteza mientras las lágrimas bajaban por sus mejillas hasta llegar a su cuello.
Se limpió torpemente la cara con la manga de su pijama entre bajos sollozos. Se recostó en su cama.
No quería volver a dormirse por miedo a soñar otra vez con aquello.Mingi era una persona muy superticiosa, creía mucho en la psicología de los sueños, de las palabras y los actos inconscientes. Pero no quería ni saber qué podría significar eso.
Lo poco que recordaba decidió anotarlo en la app de notas de su celular para no olvidarlo, como se le había vuelto costumbre con otros sueños igual de extraños. Pero ninguno lo había llevado a este extremo.
Al terminar de escribir se fijó en la fecha y hora que marcaba el dispositivo.
[9 ago. 20XX 4:26 AM]
9 de agosto, era su cumpleaños, su cumpleaños número 18. Le parecía raro que sus padres no lo hayan despertado a las 00:00 para desearle feliz cumpleaños.
De cualquier forma la noche anterior había llegado demasiado exhausto después de su ensayo de baile, llegó alrededor de las 22:30, apenas comió algo y se fue a su habitación, seguro lo dejaron dormir y sabía que le dirían feliz cumpleaños temprano en la mañana.
Vió sus notificaciones y se dió cuenta que sus amigos le dejaron unos cuantos mensajes de felicitaciones, con corazones y fotos, no eran muchos, Mingi no tenía muchos amigos, pero sin duda eran muy valiosos para él. Esos mensajes alivianaron un poco el sentimiento de dolor que le dejó el sueño.
La luz del celular cansaba sus ojos y poco a poco se fueron cerrando, hasta quedarse profundamente dormido otra vez.
⚫⚪⚫⚪⚫⚪
La mañana de Mingi fue normal, dentro de lo que se podría decir en el contexto de que era su cumpleaños. Sus padres le prepararon un desayuno especial, café, galletas, chocolate, cosas dulces como le gustaban y un pequeño pastel con su inicial y una vela de cumpleaños.
– Feliz cumpleaños mi amor – le dijo su madre y le dió un fuerte abrazo. – Ya estás tan grande, mi pequeño bebé.
– Gracias – Respondió entre risitas. Aunque no lo admitiera le encantaba que su madre lo tratara así.
– Ya eres oficialmente un adulto – dijo su padre mientras de unía al abrazo.
– Oh no, no digas eso, me haces sentir mal – rieron los tres.
Luego de eso, se separaron y se sentaron en la mesa a desayunar con el cumpleañero.
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Dancing Souls - [Fanfic Yungi (Ateez)]
Fanfiction¿Qué harías tú si un día despiertas y descubres que estás destinado a abnegarte y no ser recordado? Mingi acababa de cumplir 18 años cuando, luego de un sueño, descubre que su alma está destinada a servir a otros sin tener un alma gemela ni ser rec...