sí, no se me ocurrió un mejor título.
solo one shots (y a veces two shots) que no tienen porque estar relacionados entre sí sobre lee cheongsan y lee suhyeok pq tenían más química entre ellos que con sus supuestos intereses amorosos.
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Título : CheongSan y su despertar bisexual.
Cantidad de palabras : 1811.
TW : bifobia, bullying, homofobia.
- básicamente aquí cheongsan es un simp de los hombres y de las mujeres, en el proceso se da cuenta de que le gusta suhyeok.
- perdón si hay algún error ortográfico o gramatical<3
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CheongSan siempre supo que era diferente al resto de niños.
No era una cuestión física, en realidad era más... psicológica. No sabe como explicarlo, pero de alguna manera, sabía que era diferente.
Pequeñas señales. Sutiles.
Cuando comenzó a ver Avatar, sus amigos siempre hablaban de las chicas principales, del interés amoroso del protagonista, y eso estaba más que bien, CheongSan debe admitir que Katara era bonita y era su enamoramiento ficticio temporal. Pero Zuko y Sokka también eran lindos. De la misma forma que Katara tal vez, no lo sabía, pero le gustaban de la misma forma en la que le gustó el personaje de Katara.
Lo menciono con sus amigos de ese entonces una vez. Ellos dijieron que era raro.
CheongSan no volvió a hablar de chicos bonitos de nuevo.
Se limito a mostrar su apreciación por las mujeres atractivas, porque entendió que si otro chico le decía a otro que era bonito, estaba mal, era algo indecente.
Paso su infancia así, negándose rotundamente a ver más allá de Mulan. Mulan es linda, inteligente, y es una chica. Pero Shang... Shang tiene unos fuertes pectorales, es lindo también y.... es un hombre.
Su pre-adolescencia llegó y con ella su primer enamoramiento.
Nam OnJo.
OnJo era su amiga de toda la vida, pero cuando cumplieron trece años, comenzó a verla de una forma diferente. La pubertad le sento bien a su amiga, se dejo crecer el cabello aunque siempre lo traía amarrado en una coleta mal hecha, su piel se hizo más suave, y su cuerpo se hizo más agraciado.
Ese enamoramiento nunca llego a nada. Fue tan fugaz que a CheongSan le tomó tiempo darse cuenta de que estuvo enamorado de su amiga.
