-Vamos Kashiiiii Acepta
-*Suspira* si tanto insistes
-¡Yeeeiiiiii! ¡Vamos a la fiesta de Halloween!
-*Suspira* Vamos
Empezaron a caminar a la casa de Obito para ir con él a la tipo feria que se realizaría por la festividad
-Vamos Obitoooo apúrateeeeeeee
-V-Voy!
El chico de cabello azabache salió de la casa poniéndose los zapatos y con una bolsa de comida en su boca
-¡¡VAMOOOOOOS!!
-¡Qué ya voy mierda!
-Dejen las groserías, vámonos
-Fuimonos- dijo el rubio y empezó a correr siendo seguido por el azabache en una pequeña carrera
-Ay esto dos... -Desaparece en un sun-shin- Tardaron
-¿¡Como estás!?
-Cállense y entremos a la casa del terror
-Wow, qué directo
Con un rostro que reflejaba irritación el "albino" entró a la "casa" frente a él
-Bueno, Naru, si quieres entra tú, yo iré a comprar o no sé, pero ahí *Señala la casa* No entró ni de broma
-Está bien Obito-san- Una tierna sonrisa fue la causante de que un pequeño hilito de sangre se escapara de su lugar por uno de los orificios de la nariz del azabache (poéticO-🤚👊)-Ven Pakkun- Dijo y recogió al perrito a su lado
-Hasta que llegas
-Pedón, es que me perdí
-Ay, que bruto
-Jeje...
~5 minutos después~
El pequeño rubio temblaba, el albino llevaba una lámpara dejando al descubierto muchas cosas terroríficas para el rubio, de un momento a otro un "fantasma" apareció frente a ellos asustando más al blondo, él cual casi llorando jaló la bufanda de su amigo
-Esperate pende-
-Kakashi, tengo miedo!