Un chico albino de aproximadamente 22 años caminaba tranquilamente por la reconocida aldea escondida entre las hojas
Su nombre es Kakashi Hatake y su vida no es realmente muy interesante como lo dice él
Mientras caminaba se encontró con Naruto Uzumaki, un pequeño blondo de 13 años aproximados, ojos azules y bellas marquitas en forma de un zorro en sus tiernas mejillas acaneladas
Se encontraba en el conocido puesto de ramen de Teuchi, un vendedor el cual era de los pocos que no humillaba ni menospreciaba al pequeño niño sin culpa ni pecado
A paso lento y despreocupado el albino se acercó de a poco al pequeño que comía su ramen favorito rápidamente con una sonrisa en su angelical rostro
Cuando por fin llegó a la silla que se encontraba al lado del blondo se sentó y pidió dos ramen's iguales al de su acompañante
―Hola Naruto―Saludó con su linda sonrisa "de ojo"
―¡Hola Kakashi-Sensei!―Dijo el menor con su característica sonrisa
―¿Que tal todo?―Preguntó mientras giraba un poco su cuerpo para quedar de frente con el menor
―Pues muy bien Kakashi-Sensei, hoy estuve entrenando mucho de veras
―Oh, que bueno Naruto, me alegro de que te estés esforzando por tu sueño―Dijo con su tono tan tranquilo y despreocupado que lo caracteriza
―¡Claro que lo hago, de veras!
―Muy bien Naruto, yo creo que serás un gran Hokage―Le dijo. Por fin había llegado el pedido del albino, este mismo le dio uno de los dos platos de ramen a su acompañante
―¿Para mi?―Preguntó el blondo viendo al plato de ramen, el albino solo asintió―¡Muchas gracias Kakashi!―Lo último sorprendió un poco al mayor, nunca lo había llamado sin el "Sensei"
―De nada Naruto, sé que te gusta mucho el ramen así que no vi problema con invitarte a uno
Luego de un rato que pasó entre pláticas y risas de parte de ambos chicos terminaron de comer sus porciones y el albino en contra de la voluntad del rubio pagó todo (Incluso lo que se había comido antes Naruto)
―Kakashiii no debía pagar todo eso, de veras―Dijo en tono de reproche el rubio
―Vamos Naruto, tampoco te enojes, solo fue un regalito de mi parte―Dijo mientras caminaba con sus manos en sus bolsillos
―Está bien Kakashi, pero a la próxima yo pago todo, lo prometo, de veras
―Cómo tu digas pequeño
Siguieron caminando hasta llegar a un pequeño estanque muy bonito, se acercaron a él y caminaron un poco alrededor de este hasta que vieron a una pequeña rana
El menor se acercó un poco y se agachó para verla mejor, el albino lo siguió copiando su acción posicionándose al lado del blondo
―¡Mira Kakashi!―Dijo el pequeño―Se parece a las de el viejo pervertido―continuó con una sonrisa en su rostro
