—¿Qué pasó? ¿Qué te hicieron? —preguntó Tomas al ver a Aria volver de aquel ambiente.
—Na-nada —dijo ella con la voz un poco temblorosa, pero sus ojos y nariz enrojecidos la delataban—. Vamos. No pude esculpir hoy tampoco. Así nuestra presentación va a ser un desastre.
—¿Presentación?
—Oh, creo que olvidé contarte... Es un concurso. ¿Cuál es tu mejor habilidad?
—Eh... Creo que la música.
Aria tensó los labios.
—Ay... Bueno, ya veremos qué hacemos.
Se dirigieron a la salida y se cruzaron con dos guardianas. Una quedó mirándolos hasta verlos desaparecer tras la puerta hacia el floter.
—Carla, ¿qué...? —su compañera habló—. Creo que la han castigado.
—Ella era Eva del chico que trajimos.
—Sí. ¿Sigues con eso de que se te hace conocido?
—Sí, bueno. Tengo una foto antigua de un conocido de mi familia que se le parece. —E iba a cerciorarse del porqué del parecido.
***
Christopher entró a su habitación con semblante sombrío y EDy se acercó.
—¿Cómo te fue c...?
—Horrible —le interrumpió la pregunta, yendo a cambiarse de ropa para dormir.
El dron giró sobre su eje y contó "dos", por las veces en las que el chico le venía respondiendo lo mismo luego de estar con su Eva.
Una vez que se puso el pijama se dejó caer en la enorme cama. Rodó en esta y quedó boca abajo. Estiró el brazo hacia el lado que estaba vacío, sintiendo la suave textura de la manta que cubría ese colchón, y vio más allá en la base de carga del escritorio al dron dañado.
Suspiró y salió de la cama para ir a observarlo. EDy lo siguió.
—¿Pudiste consumar el acto?
—¿Qué? No. —Lo espantó como a mosquito, más concentrado en el dron que en la pregunta.
EDy se elevó y entró por una escotilla del techo que se abrió para él.
Christopher tocó al dron dañado y nuevamente se formaban colores alrededor de su tacto. Frunció el ceño con curiosidad, dejando su mano sobre el aparato para ver qué hacían los colores y, luego de unos segundos, se iluminó por completo, sorprendiendo al chico.
El dron se activó de repente, elevándose, y Christopher sonrió ampliamente.
—Hola, Chris.
Él dejó de sonreír de nuevo a causa de la sorpresa.
—Hablas.
—Hay algo para ti, está en el Edén.
—N-no. —Se abrazó a sí mismo—. No voy a ir al Edén.
—Hay algo para ti, está en el Edén —repitió.
Christopher suspiró, sintiendo que quizá el aparato seguía malogrado.
EDy cruzó datos con el dron de Andrea mientras ella estaba en cama, abrazando a una almohada.
La joven recordó cuando había ido al lado de Aria en la reunión, ya que Christopher la había dejado sola.
—Veo que tiene esa mala costumbre —le había murmurado.
—¿Qué?
—Se encontró con sus amigos y desapareció.
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Eva: el proyecto
Science FictionLos hombres son un lujo que solo pocas mujeres pueden darse. Aria se hace con uno, pero descubrirá que hay más cosas detrás del hecho de poseer a un chico. *** Los hombres son escasos, son un lujo, y muy pocas mujeres pueden acceder a ellos. ¿Serás...