A Barman's Work (versión en español)

Capítulo 2: Nuevos Clientes

N/A: Decidí que esta historia seguirá medianamente el canon respecto a eventos mayores, pero los detalles, de mencionarse, serán sustancialmente distintos (lectores de la historia principal sabrán a lo que me refiero).

Eso dicho, los eventos de ambos fanfic no son paralelos uno del otro, sino que ambas son su propia historia que comparten solamente el universo (en general) y personajes.

Con eso dicho, los invito a leer y comentar (o no, pero ojalá sí).

NOTA DE EDICIÓN: editado el 06 de febrero, 2023.

Disclaimer: "Highschool DxD" no me pertenece, todo el crédito a su respectivo autor. Esta es una historia de un fan sin fines de lucro y solo soy dueño de los elementos originales en esta.

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Capítulo 2
Nuevos Clientes

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Varios días después...

Las puertas del bar se abrieron una vez más mucho antes de lo habitual, y esto hizo que Issei levantara una ceja. Estaba agachado detrás del mostrador de espaldas a este, por lo que esto se convirtió una vez más en un juego de adivinanzas: ¿el recién llegado era alguien nuevo o sería un regular que decidió imitar el comportamiento de Alice y llegar a una hora diferente?

Una breve escucha reveló varios pares de pies sobre el suelo de madera, lo que despertó su curiosidad. ¿Un grupo relativamente grande tan temprano? Había al menos cinco personas entrando al mismo tiempo, por lo que una oficina había salido temprano y decidió venir a celebrarlo, algo poco probable ya que estaban en mitad de la semana, o un grupo desocupado decidió conocer el bar aprovechando la falta de clientes a estas horas de la tarde.

Una segunda escucha reveló otro detalle: la mayoría usaba zapatos de vestir o botas de suela dura. Los primeros dejaban muchas opciones, pues mucha gente en el edificio los usaba, pero ¿las segundas? Solo un puñado de grupos todavía usaba esas botas hasta la rodilla con suelas duras en la [Organización], y Overwatch no era uno de ellos: ya habían hecho la transición a las botas de combate más cortas (y cómodas, como recordó con un gruñido). Los pocos que todavía usaban esas botas largas eran los departamentos de seguridad o de unidades en las que no quería pensar. Eso significaba que, si esos sonidos eran hechos por botas, significaba malas noticias. Muy malas noticias.

Sus sentidos se pusieron alerta. ¿Y si eran de seguridad? ¿Estaban aquí para arrestarlo? No había hecho nada que mereciera el duro trato dado por los perros de caza de los departamentos de seguridad, pero claro, tampoco es que ellos fueran conocidos por jugar limpio en primer lugar. Agudizó el oído, contando siete pares de pies avanzando hasta el centro del bar. Empezó a hacer planes para escapar, analizando sus alrededores. Una botella contra la cabeza del primero podría...

—¿Estás seguro de que este es el lugar? —preguntó una voz suave, con una emoción que solo podía conectar con timidez.

Issei se detuvo en seco. Reconocía esa voz.

—Sí, debería serlo —indicó otra.

—Entonces, ¿dónde está? No sé tú, pero yo veo este lugar bastante vacío —agregó un tercero, ligeramente cansado.

—No lo sé, ¿tal vez está en su descanso?

—No debería —intervino un cuarto, su voz tan cansada como la anterior—. ¡Ni siquiera son las seis! ¿Qué clase de bar se da un descanso tan temprano?