No, no es necesario empañar la mirada cuando encuentres una razón. Una razón te guía o te complementa, pero también te hace sentir conectado a las cosas frágiles de la vida.
Es grande tener un sentir inocuo y compartible; aunque te sientas reacio a vivirlo, hay acciones que te impulsarán a adentrarte a lo temido, y es ahí cuando irónicamente, sin darte cuenta: ¡ya estás amando!
Así como caer en cuenta que nada viene solo; hasta un sentimiento viene caramelizado con otros. Como el amor, que es tan profundo y tan complejo. Aprenderás que este se construye con principios; no nace a través de un primer mirar.
Sus etapas tienen hojas de misterio, que se superan con un buen remiendo. Y si lo eterno no existe, ¿por qué nos faltan palabras para explicar tan vasto sentimiento?
Puedes analizar una cosa: "que ningún mal momento, te lleve al pecado de clausurar tu corazón". Hay tiempo para cada hazaña, y hazaña para cada paciente.
Y cuando no sepas a qué viniste, dedícate a amar; todo nace cuando hay ganas y cariño.