I hate you, but i love you. (Harry Styles)

Capítulo 2: Nuevo inicio.

- Oye, oye, tiph.,- sentí que me sacudían, pero estaba tan cómoda que no quería abrir mis ojos.- Oye Tiph, ya casi llegamos, levantate para que comas.

Entre abrí mis ojos y vi como tres personas me miraban, Louis me veía divertido, la señora que estaba en el otro puesto me miraba por encima de sus gafas, y la azafata que tenía su carrito de comida me miraba impaciente, carraspeó.

- Tenemos sándwich, hamburguesa, o bandeja de fideos.

-Bandeja de fideos, por favor.,- aún estaba aturdida por mi reciente sueño, pero el olor a comida hizo que mi estómago hiciera un sonido extraño, y mi sueño desapareciera notablemente.

-Dormiste como bebé las últimas 8 horas, siempre me he preguntado como la gente puede dormir tanto en un avión, quiero decir, holaaaa, si el avión se estrella o algo no te das cuenta.,- solté una carcajada y recibí mis fideos.

-Bueno, no veo porque sea malo eso, así no sufrirás tanto, no te darás cuenta que vas a morir.... de todas formas, no puedo creer que haya dormido 8 horas seguidas.

- ¡Te perderías toda la diversión!, toda la cosa de ponerte el chaleco y respirar por las máscaras de oxígeno, y ver personas gritando por su vida...,-lo miré con los ojos muy abiertos y el empezó a reír.,- Bromeo, yo también me quedé dormido mucho tiempo.

Nos dispusimos a comer y al terminar me di cuenta que faltaba tan solo media hora para llegar, tuve una sensación de emoción en mi pecho que nunca había sentido, quizá se debía a que iba a Londres para vivir y no de vacaciones como las otras veces. De repente, como una ráfaga recordé que estaba en el mismo avión que el chico de ojos verdes y cabello alborotado, la emoción creció un poco más y no podía esperar para llegar y poder verlo en la salida.

-¿Vas a comerte eso?,- dijo louis señalando una de mis salchichas con su tenedor.

-No si tu lo quieres.,-Me sonrió y sacó la salchicha de mi plato.

-y dime Tiph, por cierto... ¿te puedo llamar Tiph?,- asentí sonriendo.,- ¿tienes novio?.

Comencé a toser incómodamente, y él me miró divertido alzando una ceja.

-Pues, algo así, no lo sé.... antes de tomar la decisión de irme a vivir a Londres, estaba saliendo con un chico de la escuela, pero supongo que nada va a pasar, tú sabes, las relaciones a distancia no son precisamente un cuento de hadas, por lo menos no para mi.

-Oh vaya, bueno, lo siento, que mal por él, pero que bueno para Londres, ganó una soltera muy hermosa.,-sentí mis mejillas arder y le sonreí.

-¿Siempre eres tan coqueto?,- soltó una carcajada.

-No has visto nada, yo aprendí del mejor, el hombre más coqueto que conozco, mi mejor amigo, de echo está por aquí en algún lugar, no alcanzamos asientos juntos.

-Agradezco eso, ya que pude conocerte.

-Vaya, vaya, ¡y yo soy el coqueto!,- ambos rompimos en carcajadas provocando un bufido por parte de la señora a nuestro lado quién leía un periódico, eso solo provocó que Louis riera más fuerte y yo riera más a causa de su risa.

-... Señores pasajeros, les informamos que la nave se dispone a aterrizar, favor abrochense los cinturones y(...)

- Parece que llegamos. Fue un gusto que fueras mi compañero de vuelo.

-Fue un gusto ser tu compañero de vuelo.,- nos abrochamos los cinturones, y me dediqué a ver por la ventana, a pesar de la espesa neblina, podía ver algunas de las casas con sus jardines ingleses. Siempre me había parecido hermosa la arquitectura londinense. No podía esperar para ver a papá, hacía 3 meses no lo veía, y ya lo extrañaba mucho, desde que tomé la decisión de vivir en Londres me dediqué a pasar todo el tiempo que pude con mamá, ella era lo que más iba a extrañar, a ella y a mi mejor amiga Sam. No quise que fueran conmigo al aeropuerto ya que odio las despedidas. Aunque pensándolo bien, me hubiera gustado que Sam viera al chico sexy de la sala de espera, se habría vuelto loca, lo más seguro es que ella le habría hablado, reí al imaginarme la escena. El avión aterrizó y sentí crecer de nuevo la emoción en mi pecho. Era oficial, a partir de hoy, comenzaba una nueva vida.