¿stream? | markhyuck [ en edición ]

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nota: capítulo algo más largo y con más uso de inglés, o eso creo kdkdkd espero les guste uwu

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Ya sabía dónde vivía Mark, en uno de sus tantos chats y momentos de conversación, intercambiaron direcciones y Haechan hasta le pasó su curp. Su casa no quedaba muy lejos de la universidad en donde habían quedado, a unos diez minutos caminando. Aparte, tenía un aspecto imposible de confundir, así que sería muy fácil llegar a ella. Nunca soltó la mano de Dejun desde que el avión aterrizó, necesitaba algo a que aferrarse para que no le diera un ataque de ansiedad, así que dejó la mano de su primo roja y con algo de dolor.

Llegaron en viernes, todavía tenían como dos semanas antes de que empezarán las clases, los trámites y demás cosas habían sido arreglados por el gobierno para que no tuvieran muchas complicaciones. Tenían esas dos semanas para viajar de su país al nuevo, pero a Haechan le gustaba la puntualidad y quería llegar antes que Lucas, por lo que dos días después ya estaba en Canadá. Para su sorpresa, sus papás no lo habían regañado, le dijeron que estaban muy orgullosos de él y que se divirtiera mucho, hasta le compraron otra maleta y como dos chamarras que pesaban más que una cobija de tigre. 

Iba corriendo porque había quedado de llegar a las doce a casa de Mark, su vuelo había aterrizado a las diez y tenía mucho tiempo de sobra, pero Dejun, otra vez, se había excedido con eso de "snacks ilimitados" dentro del avión. Mientras el mayor estaba en el baño sufriendo las consecuencias de sus acciones, Haechan tuvo que hacerla de buena persona e ir a buscarle toallitas húmedas y algún medicamento. En eso perdieron más de una hora.  

—Oh, sorry! —dijo esa persona cuando Haechan chocó y se cayó. Lo tomó del brazo y lo ayudó a levantarse. —Are you okey? I'm kinda gone today and I didn't see you, my bad. 

Cuando se puso completamente de pie, lo miró a los ojos y quedó un tanto sorprendido, nunca había visto a nadie con una apariencia tan amable como él, alto, cabello castaño, ojos grandes y una sonrisa genuina.  —It's all right, don't worry. —le regresó la sonrisa. —I'm late, so... —recogió su mochila y medio avanzó. 

 Pero el desconocido lo tomó suavemente de la muñeca. —What's your name? 

—Haechan. —dudó bastante. —Again, I'm late. —le soltó la muñeca. 

—See you later, Haechan. —escuchó por detrás, se despidió con la mano y el mencionado le regresó el gesto con amabilidad. 

Pensó en ese encuentro tan extraño en lo que seguía corriendo, su prisa era tanta que no espero un taxi porque perdería más tiempo en esperarlo que en llegar.  

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—Es esta, ¿verdad? —preguntó Dejun cuando por fin se detuvieron en una casa con una puerta amarilla. En palabras de Mark, a su mamá le gustaba llamar la atención de manera sutil y por eso había cosas extrañas en la fachada.

Asintió, dejó sus cosas en el piso y respiró profundamente. Aproximó su mano al timbre, pero se arrepintió de lo que estaba haciendo, o tal vez le temblaba mucho la mano. Eso le pasó unas tres veces más.

—¡Toca de una perra vez! —se exaltó Dejun y luego soltó una risa.

—Es que, es que... —dio un pequeño brinco y se dio la vuelta. —¿Qué tal que me abre su amá y le doy pena y me cierra la puerta en la cara y le prohíbe a Mark verme? —lloriqueó.

—Bueno, tocó yo, ya tranca. —estaba a centímetros pero Hae le dio un manotazo.

—¡No! —se puso a brincar, esa era su manera para sacar nervios por medio de bailes medio extraños. —Es que, es que, es que...