Reino de cenizas

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A medida que pasen los capítulos voy haciéndolos más largos. Por eso mi tardanza al publicar, espero que sepan entender :')

Que disfruten la lectura <3

—¡Finalmente Ray accedió a que sea tu guía turístico! —celebró Harry— Bueno, más bien eso después. Primero me pidió que te introduzca un poco a nuestra comunidad. Todo gracias a que Ross estaba haciendo cosas importantes como para hacerlo él.

—Te recuerdo que somos los dos, idiota —bufó Cam a su lado.

—Sht.

El entrecejo de Cam se frunció.

—¡Pero...!

—Sht.

—¡Ha...!

—Sht. Sht. Sht. Calla niña. ¿No ves que tenemos compañía?

—Como si eso me importara...

Después de que tuviera esa charla con Ray y Ross, Cam y Harry se aparecieron para al parecer, explicarme las cosas. Nos encontrábamos en medio del bosque, donde habían árboles largos y verdes. Trataba de acostumbrarme a todo lo que sucedía, o de alguna manera, adaptarme. Pero no podía evitar pensar en mi familia, en dónde se encontraban y si por lo menos se encontraban bien.

Volví hacia mis acompañantes, para encontrarme así a Harry dirigiendole una mirada asesina a Cam. Pero al recordar mi existencia, volvió hacia mi con su característica sonrisa.

Pasó su brazo por encima de mis hombros y me dio un impulso para que empezáramos a caminar.

—Muy bien, preciosa. ¡Historia básica! Cómo se formó esta hermosa comunidad.

—De acuerdo...

—¡Lo cual fue muy simple! Verás, te explico —se aclaró la garganta exageradamente antes de continuar. Causando asi mismo que Cam a nuestro lado rodara los ojos—. Nosotros somos especiales.

—¿Especiales?

—¡Exacto! Cam, muéstrale.

Cam rodó los ojos nuevamente y mientras inflaba un mini globo con su bola de mascar, caminó unos pasos lejos de nosotros. Se acercó al suelo y posicionó sus manos en él mientras cerraba los ojos, causando así mismo que flores empezaran a desender de él.

Mis ojos se abrieron en par.

—Pero qué...

—¡Taran! ¿Viste eso? Impresionante, ¿verdad? —alagó Harry.

Cam volvió a levantarse y pasó sus manos por sus vaqueros para sacar el resto de tierra que había en ellos, para luego volver nuevamente con su semblante  aburrido mientras masticaba su bola de mascar.

—¿Así que tienen poderes...? —indiqué.

—¡Exacto! —asintió Harry— Pero preferimos el término habilidades.

—Whoa, eso es...

—Lo sé, extrañamente fantástico.

Me aclaré la garganta.

—¿Y tú tienes alguna habilidad?

—Mhmn.

Se separó de mi y con un movimiento rápido, una brisa corrió frente mío, acompañada por hojas y flores que Cam con anterioridad había creado.