Querida yo, quisiera saber que nos ha pasado, quisiera saber dónde está aquella niña que disfrutaba de vivir cada segundo como si fuera el último, donde está aquello que nos hacía levantarnos con una sonrisa cada mañana, donde se quedaron esas miradas inocentes hacia el espejo.
Ya no sonreímos para nosotras, sonreímos para los demás, somos un alma que finge, un alma que llora, un alma que miente y que siente que no es importante.
Lo difícil que sería contarle a nuestro yo de 10 años que ya no disfrutamos comiendo, que no disfrutamos saliendo con ropa ajustada, que no disfrutamos siendo nosotras, que hemos perdido nuestra magia, que nos hemos auto consumido y que tenemos miedo, miedo de no poder salir de este agujero negro que nos empuja, a lo que algunos llaman depresión y otros perdición.
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Querida yo: Vamos a contar lo que nos pasa
Poetryreflexiones que hace una cuando no puedes hablar con nadie
