-Contenido: lime-Los personajes tienes mas de 18!!!
Pov Autora
El peliverde estaba construyendo algo nuevo, como no. Junto a Chrome, Gen, Suika y Kohaku
Todos estaban en lo que hacían cuando unos gruñidos los alertaron
El felino gruñiendo salia de los arbustos, viendo a los asustados
-Un jaguar! Todos dentro de la caseta!- dijo Senku mientras soltaba lo que tenía en la mano
Todos hicieron caso, pero obviamente nadie podría ser más veloz que el animal. Cual al ver que estos escapaban, vio la oportunidad perfecta para lanzarse a atacar
Se tiró sobre Senku, a punto de morderlo, pero un silbido lo detuvo inmediatamente
El jaguar salió corriendo hacia atrás, quedándose debajo de un árbol mientras miraba amenazante a los demás
Todos se encontraban sorprendidos, pero más aquel peliverde
Sus ojos totalmente abiertos como platos veían una figura femenina en lo alto del árbol
Una mujer que él conocía a la perfección, su mejor amiga
-Yō, Senku- saludó la chica con una cara totalmente tranquila
Este no sabía que decir, tenia muchas preguntas
Pov _______
Baje del árbol de un salto, solo que nada más pisar el suelo, una chica rubia junto a otro dos guardias estaban a mi alrededor. Preparados para atacar
-Senku! ¿La conoces?- preguntó la chica
Suspire pesadamente para luego hacer un rápido movimiento, cogiendo a la chica por el cuello mientras ponía mi cuchillo al lado de su cuello
El jaguar en cambio tumbo a los guardias asustandolos, poniéndose delante de mi
-Mas os vale fijaros a quien le dirigis las armas- dije soltándola, haciendo que el jaguar vuelva a mi, envolviendome con su cuerpo en modo de protección
-No hacía falta ser tan agresiva- dijo Senku levantándose del suelo
-¿Ah? Ellos empezaron primero- me queje cruzándome de brazos
-Esto...Senku. ¿Quien es ella?- preguntó un chico moreno
-Es de mi era, antes de volvernos de pidra. Éramos buenos amigos. ________, una de élite en las artes marciales, ademas de ser otra genia - respondió mirándome
1 hora después
Después de haber aclarado las cosas, todos se fueron a dormir
Solo quedamos Senku y yo sentados en frente de la gran caldera esperando que la carne se hiciese