Sólo Ámame.

2

George va al baño. Suena su celular. Lo busco en sus pantalones tirados en la alfombra.

Beatrice llamando...

Me asusto y me voy a un rincón del apartamento. Contesto y mi voz es temblorosa:

-A-aló?
-¿Dónde está George?
-...
-¿Quién eres?
-...

Siento que se abre la puerta. Me paralizo.

-¿Qué haces con mi celular?
-Eeeh...

¿Qué hago? ¿Qué digo? ¿Salgo corriendo? Mierda. No tengo nada puesto.

-Dámelo. -Frunce su ceño.

Se lo doy. Beatrice. Beatrice. ¿Quién es ella?

-Lo siento. Adiós.

Corro a buscar mi ropa tirada en su alfombra. Me visto lo más rápido posible. La puerta está cerrada. Mierda. De nuevo.
Intento abrir. Busco visualmente alguna llave o algo. Nada.

Siento unos pasos acelerados hacia mí. Me armo de valentía y le pregunto:

-¿Quién es Beatrice?

Su mirada fija e intimidante me persigue.

-No te interesa.

¿En serio? ¿No me interesa?

-¡Abre la maldita puerta!
-No.- Dice secamente.

-¡Abre la puerta, ahora!

Se produce un silencio. Me apoyo en la puerta. Siento que está ahí. Tal vez pensando qué hacer.

-Ella... Ella es simplemente mi prima.

Rompió el silencio abruptamente. ¿Qué rayos pasa por su cabeza?

-¿Podrías abrir la maldita puerta?

Su mirada implantada en la mía hace que tenga un poco de compasión. Pero sigo dudando. ¿Quién es Beatrice? Una simple prima no hace que alguien se comporte de esa manera. ¿Por qué tanto escándalo?

-¿Acaso me dirás quién es?
-No.
-Me acabas de decir que es tu prima.
-Sí.

Su mano acaricia su cabello desesperadamente con tal de darme respuesta alguna.

-Sigo esperando...

Él sigue sin dicer nada, no quiero seguir aquí. Me dirigo a la salida, pero me detiene con su mano forzando mi brazo.

-No te vayas
-¿¡Entonces?!
-Es mi prima. Eso es todo.
-¿Entonces para qué escandalizas tanto si solamente es tu prima?- Solté despertando a más de algún vecino.

Me deja libre. Siento mi cara húmeda. Estoy llorando. ¿Estoy llorando?. Dios mío.

Camino aceleradamente al salir de ese lugar. La avenida está desierta. Uno que otro auto.

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Narra George:

Mierda. ¿Qué estoy haciendo? Nunca habia dejado ir a un chica cuando ella queria, maldita Beatrice. Le devuelvo la llamada

-¿Alo?
-No me vuelvas a llamar nunca más en tu vida

Corto la llamada, tiro el teléfono al piso haciendo que todas sus partes salgan volando. Me siento en el sofa. No la puedo dejar ir. Me levanto y salgo apresurado para alcanzarla, hecho un vistazo a la avenida y simplemente se fue.

Vuelvo al apartamento y siento frío, no quiero hacer nada así que me voy al dormitorio me tiro en la cama frustrado y cansado.

Me despierto en la mañana, me arreglo y me voy a trabajar, espero ver a Jay en el colegio

Veo a Jay hablando muy animadamente con un chico, ¡espera! Se estan besando y en mi cara, corro y empujo al chico

-No te le vuelvas a acercar a ella ¿me entendiste?

-Porque no te vas con tu prima mejor, yo estoy feliz con él

Veo que se alejan de mi...

Me despierto desesperado. Miro a mi alrededor. Paredes grises. Almohadas. Mi radio. Okey. No estoy bien. Veo la hora. 04.53 am. 2 horas más para relajarme. Mejor me doy un baño de agua fría. Me voy al sofa y me siento, no se cuanto tiempo estoy hasta que suena el despertador, comienzo a prepararme.

Después de 30 minutos, salgo en dirección al colegio. Suena el timbre para entrar a clases, empiezo a observar a las chicas de su curso para ver si esta.

-Señor George, adelante.

Entro a la sala de clase con el curso que me toca. Al menos los niños me relajan y puedo hacer la clase normal. Después de una hora y media, suena el timbre para salir a recreo.

-Espera ahí- le digo a Jay, tomandola del brazo.

-Suélteme- tratando de salirse del agarre

-Tenemos que hablar. Ahora.- Le digo más serio de lo normal.

-No tenemos nada de que hablar, maestro.

-Acompáneme a mi oficina.

La llevo pegada a mi. Se nota temblorosa y está pálida. Tomamos la escalera para subir y le tomo la mano. Llegamos a la oficina y no quiere sentarse.

-Estoy bien así. ¿Qué quieres de mí?- me dice seria. La noto muy segura de sí misma. Me gusta. Será dificil manipular la situación.

-¿Panqueques?- le ofrezco evadiendo o más bien tratando de tranquilizar este espectáculo.

Me mira con cara de "¿y ahora que mierda?" Pero a la vez siento que me ama. ¿Por qué es tan perfecta?

-Eh... bueno, sólo quería relajar todo esto.
-Yo estoy bien. No sé qué puede perseguirte tanto.
-Quiero que sepas que te amo.
-George, George, George... -me dice insana. -Te lo estoy diciendo enserio -digo lo mas serio posible, la quiero y mucho, pero nunca he sentido algo por alguien antes
-Ya no le creo nada, MAESTRO, creo que será mejor que tengamos esta relación alumna-maestro.

Esto me esta hartando, me lanzo encima de sus labios y comienzo a caminar hasta dejarla contra la pared, al principio ella estaba tensa, pero ahora esta siguiendo el beso. Ella coloca sus manos alrededor de mi cuello y yo posiciono las mías en su cintura.
Estamos apunto de pasar a algo más cuando suena el maldito timbre de clases
-Esto no ha terminado -digo con un tono de advertencia

-No lo crea- me responde Jay y sale por la puerta dejándome solo en la oficina.
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