Crossover entre Supergirl y el UCM (Universo Cinematográfico de Marvel)
Cuando Kriptón murió, sus restos cayeron sobre Daxam ocasionando la destrucción del planeta.
Dos naves lograron salir ese día antes de que todo fuera destruido. En una nave sali...
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E.T.—Katy Perry
Narra Dani-El
Caminaba por Catco buscando a la linda rubia de gafas falsas para decirle que terminé el trabajo que me asignaron, pero creo que me perdí porque terminé en un piso diferente cuando subí al ascensor. Incluso después de dos días seguía perdiéndome entre los pisos del enorme edificio.
Estaba tan distraída que tropecé con alguien y los papeles que cargaba en las manos cayeron al suelo.
Me levanté del suelo apilando los papeles en mi brazo. Y quedé boquiabierta cuando vi a la persona con la que tropecé. Una mujer pelinegra de ojos verdes profundos, piel blanca y mandíbula definida. Su cabello recogido dejaba expuesto su cuello y clavículas.
—Wow—fue lo único que salió de mi boca, sentí como si no pudiera coordinar mi cuerpo.
¿Hace calor?
—Estoy bien, descuida—habló sonriendo, mostrando sus blancos dientes.
—L-lo siento, estoy algo perdida—titubee aclarando mi garganta.
—Eres nueva
—¿Se nota mucha?—acomodé mis gafas.
—Si un poco—rió asintiendo.
—Lo siento—repetí apretando los labios en línea recta.
—Descuida—negó, manteniendo su sonrisa—Soy Lena
—Es usted un bombón
—¿Disculpa?—cuestionó levantando una ceja.
—Dani, ¿qué estás haciendo?—cuestionó Kara llegando y mirándome no muy feliz.
—Winn dijo que bombón es una mujer hermosa en la Tierra... y por sus miradas creo que no está bien dicho—murmuré lo último haciendo una mueca.
—Escucha, no dejes que Winn te enseñe nada sobre la Tierra—sentenció masajeando sus cienes.
—¿No eres de la Tierra?–preguntó la pelinegra en un murmullo.
Kara me miró rápidamente.
—Soy Dani-El de Daxam. Espera no, no, no, soy Daniela. Número cuatro, nueve, ocho, cero, cero
—No, Dani, no tienes que darle tu número de seguridad social—interrumpió Kara poniendo su mano en mi hombro.—Lena, ella es mi amiga, Dani. Se está adaptando a la Tierra, aún le cuesta algo de trabajo—dijo como si no le quedara otra opción que decir la verdad.
—Lo arruiné, ¿cierto?—murmuré dejando caer mis hombros y bajando la mirada, muy desanimada.
A veces olvido que no debo decir todas esas cosas, por suerte Kara me ha salvado, pero hoy de verdad lo arruiné.