Enamorarse de el hermano menor de tu mejor amigo no esta bien, pero a Jungkook se le dificulta la tarea luego de encontrar a Taehyung en una situación comprometedora que hará que algunos de sentimientos guardados terminen saliendo a flote.
...
Se encontraban nuevamente en el centro comercial sentados en una de las tantas mesas de la zona de comidas, y valga la redundancia, estaban comiéndose un helado.
–...por esa razón es mejor el tiburón blanco —concluyó jungkook con orgullo.
–Todos sabemos que la orca es mejor —interrumpio Yoongi— ¿No es ese tu hermano el de allá? —se dirigió a Namjoon señalando la tienda a la espalda del azabache quién junto a el moreno dirigieron la mirada hacia el lugar señalado y vieron como taehyung salía de una tienda con algunas bolsas en una mano, y de la otra un chico castaño con quien reía.
–Es taehyung —afirmó.
–Esta saliendo de un sex shop —añadió Yoongi abriendo los ojos después de fijarse en el nombre de la tienda provocando que el hermano del chico frunciera el ceño, y antes de siquiera notarlo taehyung ya se estaba acercando a ellos.
–Hola chicos —saludó alegre y se sento junto a su hermano pasando un brazo por sus hombros y dejando a yoongi aplastado junto a las macetas de las plantas que los rodeaban— Hermanito precioso con un sin fin de valores hermosos... ¿me haces un prestamo? —haciendo su mejor puchero lo miro fijamente, pero como respuesta solo recibió un empujón y luego fue jalado por el brazo hasta alejarlo de la mesa.
–¿Quien es ese? —cuestionó a la vez que buscaba en sus bolsillos la billetera.
–¿Ese quien?
–Aquel que te está esperando en la heladería —señaló discretamente el local.
–Ahh —rio nervioso rascando su nuca— Minjae.
–¿Y pensabas presentarselo a tu hermanito presioso? porque por lo que deduzco estaban comprando ya pasaron la primera etapa.
–¡Oye! deja de molestar —dijo moviéndose para tapar, o tratar, de tapar a Minjae, que llevaba en sus manos las bolsas de aquella tienda— Después te pago el dinero —extendio su mano y su hermano le dio unos cuantos billetes mientras rodaba los ojos. Luego de agradecer se fue sonriendo mientras el otro volvía la mesa para terminar su helado.
–Cuenta chisme —dijo el Yoongi apenas se sento.
–Un ligue de Tae.
—Y ya sabemos para que era la lencería...
—¿Que lencería?
—¿Hum?, no, ¿quien dijo lencería?.
Ajeno a ese par estaba jungkook cuchareando su helado con él ceño fruncido.
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Taehyung volvió a su casa por la noche, se encontraba muy agotado y lo único que quería era tocar su cama y caer profundo, así que después de saludar a su papá y a su hermano subió a su habitación para prepararse antes de dormir.
