Me sumergía en las palabras y sin saber dónde estaba, seguía escribiendo.
En el borde de un precipio, mis recuerdos no pueden decirme como llegué aquí.La primavera estaba por llegar y yo solo seguía viendo el café derramado y nisiquiera una despedida salió de esa alma. Al veces siento su compañía tan cálida. Ahora que no estás , todo lo que escribo no tiene coherencia . Después de todo, podría dedicar mi vida entera escribiéndote poemas que quizás nunca llegarías a leerlas
Han pasado 303 dias desde que la última vez que te vi. Estoy nadando contra la marea intentando llegar a esa noche donde te conocí y volverte a ver cómo la primera vez que te vi.
No sé realmente cómo pasó esto. Me enamoré en otoño, los días se sienten tan largos y cansados desde que te fuiste.
Cuando llegó el verano, el sol se caía a pedazos y escuchaba como la lluvia no paraba de mojar las ventanas. Siempre me retumbaba cada recuerdo contigo. Tu presencia llenaba mi soledad, tu amor llenaba mi pobre corazón, tus mensajes eran las historias que siempre quise leer, tus ojos tan bonitos que iluminaban igual que una estrella donde me quería quedar para siempre, o quizás el tiempo que me permitiera.
Ahora sólo siento una pequeña nostalgia.El sol me calentaba mi ser, mientras caía otra vez en el laberinto interminable. Me pregunto si alguna vez terminaría con todo esto, aunque ya sé la respuesta desde hace mucho tiempo.