Trafalgar Law, es un hombre que suele poner la responsabilidad en primer lugar, controlador, astuto, arrogante, orgulloso, honesto e incluso peligroso...
Codiciado por mujeres lo sabe y, le divierte.
Después de una mala decisión, su trabajo le da
Un...
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Atardecía, luces naranjas destellaban sobre los edificios de la ciudad, Iris miraba por la ventanilla del sedan que conducía Shachi, en el asiento del copiloto se encontraba Law. Que texteaba con alguien por celular.
Habían conseguido autorización para llevar a Iris a casa, con la clara orden implícita de quedarse con ella, hasta el día siguiente que la llevarían a la estación para terminar con el interrogatorio.
Un chiflido de admiración salió de la boca de Shachi al aparcar en el edificio donde Iris residía, Law levanto la vista de su celular solo para ver que ocasionaba la reacción de su compañero.
Alzo las cejas sorprendido, Iris vivía en uno de los edificios mas lujosos de la ciudad, un rascacielos, de paredes de cristal, solo las paredes de recepción eran trasparentes como para que todo el que pasara por ahí, pudiera ver cuán lujoso era por dentro, los demás pisos tenían cristales que reflejaban los edificios vecinos, tal como espejos.
-¿ vives aquí?- preguntó Shachi sin disimular su emoción.
Iris lo miro sin comprender.
-Si, por eso te di esta dirección. - afirmo sin sarcasmo ni ironía.
Law tuvo que reconocer que la pelinegra no parecía el tipo de chica que viviría en un lugar tan glamuroso, sintió un codazo en su costado, miro con el ceño fruncido a su emocionado compañero.
-Sera como estar en un hotel de lujo, hermano- soltó con alegría.
-Como estar en un hotel de lujo-afirmo Law serio- solo que de guardia y, trabajando.- le recordó mirando desaparecer la sonrisa de Shachi.
El moreno apago el coche. - matas mis ilusiones, hermano- se quejo sin su animo de segundos atrás.
En ese momento.
Iris bajo del auto sin esperarlos y, Law bajo de prisa tras ella, sin responder a Shachi. Le dio alcance reteniéndola con suavidad por el brazo, ella se giro a verlo sin comprender parpadeo dos veces, mirando su mano sobre su brazo, a excepción de su padre era la segunda persona en tocarla sin lastimarla.
-no te separes de nosotros.- ordeno Law mirándola con preocupación.
Iris asintió en respuesta, cuando Law la soltó ella acaricio el lugar donde la había tocado, se sentía extrañamente cálido.
Aguardaron por Shachi, finalmente entraron, la recepción era custodiada por un hombre de mas de cincuenta años, según observo Law, vestía de traje sastre y, se encontraba leyendo cómodamente en una especie de cubículo de cristal.
