єℓ ѕeхy тєяαρєυтα {נυѕтιивιєвєя&тυ} єяóтιcα

Capítulo 19 ; "¿Quién es?"

Las manos de Justin hacían un vaivén de arriba hacia abajo en la espalda de ella, proporcionándole paz y tranquilidad después de todo lo que se había formado esa tarde, solo él podía tranquilizarle de esa manera tan dulce y por eso lo quería con todo su corazón.

Ella alzó la mirada fijando sus ojos en los de él, y sonrió al saber que la estaba observando todo ese tiempo que se habían acurrucado en la cama.

Sus rostros se fueron acercando poco a poco, hasta que sus labios se tocaron en un leve roce con sensualidad, todavía con los ojos medio abiertos Justin se pudo dar cuenta que las pupilas de sus ojos se dilataban de deseo.

Pasó su lengua entre medio de sus labios entre abiertos provocando un suspiro de parte de ella y en un rápido momento ya tenía sus labios pegados a los suyos, sin ningún pudor.

Ella sonrió en medio del beso y empujó a Justin a recostarse en el colchón mientras que ella en su lado le besaba gustosamente, pero un mechón de pelo de ____________ acabó entre sus labios, impidiendo seguir con ese beso y Justin se apartó de ella al mismo tiempo que cogía ese mechón y lo dejaba detrás de su oreja.

Como dicen en el refrán.

Siempre hay un pedazo de cabello que interrumpe un buen beso.

Ella se rió al notar que Justin no dejaba de observarla desde su punto de vista, mientras que la mano que había apartado el mechón de pelo seguía en la parte de su oreja, dándole leves caricias con la yema de sus dedos, erizando su piel de arriba hacia abajo.

-¿Por qué me miras tanto? -preguntó avergonzada.

-Porque eres preciosa. Disfruto mirando a la gente preciosa, y ya decidí hace tiempo no negarme a mí mismo de los placeres más simples de la existencia. -le susurró, cerca de sus labios.

Ella se mordió el labio, soltando una pequeña carcajada. -Me has salido poeta.

Él se rió apoyando su cabeza en la mullida almohada.

-¿Qué te pasa? -le preguntó él, al notar que la sonrisa que tenía hace unos segundos atrás, había desaparecido de su cara de un momento a otro.

Ella se mordió el labio mientras negaba con la cabeza, y escondía su cabeza en el hueco de su cuello, al mismo tiempo que cerraba los ojos.

-Sólo... me vinieron imágenes de lo de esta tarde. Nada más. -negó con la cabeza, no dándole importancia. -Lo siento.

-No tienes por que disculparte, cariño. No has tenido la culpa de lo que pasó esta tarde, solo necesitabas desahogarte y te a sentado bien eso. Y eso es lo que importa, el tema de tu madre, es totalmente diferente. Ella es una mujer...

-Indescriptible, cariño. Ella es una mujer sin adjetivo correspondiente. -se rió.

Él negó con la cabeza sin ganas de reírse. Él dio la vuelta sobre la cama y esta vez estaba él medio encima de ella, solo tocarla por el costado izquierdo.