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~𝒮𝒸𝒶𝓇ℯ𝒹 ℊ𝒾𝓇𝓁~
—Oye. - La Interrumpió. - ¿Has estado sola, verdad?
“ ¿Él.. lo sabe? ¿Sabe que viene su hermano? No. No creo. De ser así ya me hubiera reclamado o algo por el estilo.. sus amenazas estarían presentes. No lo sabe.. no tiene idea.. ”
Desvío el tema de su pregunta con cosas suyas. No quería darle más vuelta al asunto. Aunque por dentro quería gritarle que regresará porque su hermano la lastimaba mucho, pero seguramente no le creería y si lo llega a hacer, creía que no haría nada. Le platicó que retomó la practica en la barra y los movimientos que realizaba, no eran tan forzados o complicados ya que debía volver a recuperar la movilidad y fuerza en sus brazos y piernas porque había perdido un poco de práctica en ello. Sintiéndose un poco avergonzada por contarle esas cosas que seguramente él no entendía hasta que las pueda ver en persona y la idea de él sentado frente a ella mientras yo esta bailando en el tubo le hizo sentir escalofríos. Pero fueron, de alguna forma rara, buenos. Son escalofríos que te hacen sentir ¿Libidinosa? Era una buena sensación solamente.
Quería seguir hablando para distraerse por completo y dejar de sentir esa fea sensación de ser observada, hasta que escuchó a Katakuri hablar otra vez, cortando cada palabra de si.
— Solo no. No me olvides.
“ ¿Olvidarlo? Jamás podría. Lo quiero. Lo quiero tanto que la idea de olvidarlo me duele. ”
— Amo Katakuri, jamás haría algo así. Usted a sido tan amable conmigo últimamente que lo menos que merece, por mi parte, es ser olvidado. Recuerde. Yo lo estoy esperando con ansias. Impaciente de volver a abrazarlo y apreciarlo. Por cierto, hoy usted se ve hermoso. — Ella no lo sabía pero podía percibir un poco de vergüenza en su amo debido a su silencio, algo que la hizo reír un poco por la tierna imagen de Katakuri con un sonrojo en sus mejillas. Si, definitivamente lo extrañaba. — Amo.. — Lo llamó suave, escuchando un "Mm" por parte del ajeno. — Lo extraño.. lo extraño mucho.
Escuchó un suspiro del otro lado de la línea seguido de un doloroso: Debes descansar, ya es tarde. Y por consiguiente la llamada había sido cortada. Ella suspiró antes de decidir enviarle un vídeo. Sería la primera vez que lo haría y aún así estaba emocionada y un poco nerviosa, pero aún así, lo terminó haciendo. Al final del vídeo le decía cuánto lo quería y cuánto lo extrañaba, lanzando un beso con su mano y cerrando un ojo. Se sentía ansiosa por saber la respuesta que le daría pero no hubo ni una. Simplemente la había dejado en leído.
Mordió su labio inferior restándole un poco de importancia y metiéndose la idea en la cabeza de que seguramente él no sabía que decir al respecto y por eso su silencio fue lo que obtuvo. Estaba preparando su cama para alistarse ya a dormir pero sintió unas manos hacer posesión de su cintura y dar un apretón, sintiendo esas simulaciones de embestidas contra su pequeño cuerpo. Sostuvo fuerte la sabana con sus manos, arrugando la tela. Cerró sus ojos y mordió su labio inferior ejerciendo un poco de fuerza.
