Minecraft: Un Mundo Inusual

Pequeños huesos

Años atrás.........

En una aldea donde abundaban los prodigios existía un pequeño niño que a duras penas sabía manejar las armas. Este niño era feliz dentro de lo que cabe, su familia no era nada de otro mundo, sus relaciones no eran las mejores con sus vecinos, apenas ponía atención a sus clases de manejo de armas y casi siempre era castigado. Pero él era feliz.

Aunque no todo fue de color de rosas. Una fatídica noche llegó y con ello la destrucción de la aldea. Una aldea de esqueletos llegó para invadir la aldea del pequeño, se encerró en su casa mientras toda su familia se fue a enfrentar a los invasores. 

Por medio de las ventanas pudo ver como los suyos iban cayendo poco a poco, sin mucha esperanza decidió agarrar un arco que tenía su padre guardado y unas cuantas flechas. Saliendo por la puerta intentó no hacer mucho escandalo para irse. 

Aunque antes de salir del poblado decidió ayudar a un vecino suyo, este se encontraba forcejeando en el suelo con un esqueleto. El niño rápidamente tensó su arco y disparó una flecha que por suerte impactó en el hombro del esqueleto, haciendo que su aliado pueda matarlo con una daga. 

El pequeño se sintió feliz de haber podido ser de ayuda, aunque su sonrisa desapareció al instante al ver como una flecha impactó en la cabeza de su vecino. Sin pensarlo dos veces corrió a las afueras del pueblo dónde había un bosque, aunque antes de poder salir una flecha impactó en su espalda. 

Sin querer mirar atrás se levantó a duras penas para después recibir otras 2 flechas en la espalda. Sin prácticamente fuerzas cayó al suelo. Pocos segundos después el esqueleto que le disparo sacó las flechas de la espalda del chico. Este se intentó levantar, pero apenas se puso en posición de gateo el esqueleto pateó su estómago tumbándolo

El niño fue levantado con suma facilidad viendo de frente a su agresor. —¿Últimas palabras mocoso?— Cómo respuesta el esqueleto recibió un escupitajo del pequeño, viéndolo con furia el mob le pegó un golpe en el estómago y lo tiró al suelo. El niño escupió algo de sangre mientras agarraba su abdomen en posición fetal. 

De reojo el niño pudo ver como su agresor cayó al suelo muerto. Sin dudar un segundo más agarró las flechas del esqueleto y escapó al bosque. 

Los primeros días de supervivencia del niño fueron un total infierno, no sabía cómo cazar, casi se le acababan las flechas, no tenía para comer, en las noches tenía que luchar para sobrevivir con otros mobs y casi muere más de una vez. 

Al regresar a su pueblo observo como estaba completamente destruido, con sus ojos llorosos fue a dónde quedaban los restos de su casa, con esperanza de encontrar algo útil.

Al inspeccionar su casa se dio cuenta que se llevaron todo lo importante acerca de su familia. Al hacer memoria pudo recordar que su madre había dicho que tenía un escondite dónde guardaba algunas cosas. Al ir a la entrada levantó la madera que aún permanecía intacta, encontrando una bolsa junto a una nota.

Agarró la nota y se puso a leer, la nota decía: "Hijo, eres el único que sabe acerca de este escondite, si llegas a leer esto es porque algo pasó que tuviste que recurrir a este lugar. Dentro de la bolsa hay un pequeño colgante que fue pasado de generación en generación como símbolo de esperanza. También hay varias flechas especiales para cazar. Sé que eres fuerte, aunque no prestaste atención a tus clases lograras sobrevivir a todo. Si estoy muerta cuando llegues a leer esto, por favor, sobrevive y deja tu legado. Con mucho cariño, mamá ♡"

El niño agarró la nota con fuerza abrazándola mientras pequeñas lagrimas recorrían su rostro. Abrió la bolsa y se puso el colgante en el cuello, recogió la bolsa con las flechas y se fue del pueblo aún con sus ojos cristalinos.