P.O.V. Nina
Probablemente si no hubiera salido esa tarde todo sería diferente, si lo sé, ya era demasiado tarde para pensar en ello.
De todas formas no solía acudir a esas fiestas y si lo había hecho era para celebrar el cumpleaños de mi mejor amigo, aunque era de esperarse que al ser su cumpleaños sería el centro de atención, y muchas chicas estarían tratando de seducirlo, algo que por mi desgracia no había logrado conseguir por muchos años.
-¿Segura que estas bien? – Teo se acercó a preguntarme, yo solo asentí sin querer decir una sola palabra para no darme a conocer que me sentía vulnerable y que probablemente estallaría en lágrimas una vez más a causa de los rollos que tenía Héctor cada que una chica se le insinuaba – si quieres que te acompañe, solo iré a despedirme de los chicos y me voy contigo – se ofreció Teo, y aunque agradecía que lo hiciera, realmente quería estar sola.
-Quiero caminar sola, no te ofendas – trate de dar mi mejor sonrisa, Teo era un gran amigo y aunque tenía un enorme corazón y era guapo, lastimosamente no ocupaba mi corazón como lo hacía mi mejor amigo.
-Bien, pero avísame cuando llegues a casa ¿está bien? – me hizo prometer, yo sonreí y me despedí de él, sin despedirme de nuestro anfitrión, después de todo no tenía sentido ir a buscarle, era más que evidente que él se encontraba ya revolcándose con esa estúpida pelirroja.
Camine durante algunas cuadras para tratar de buscar un taxi, probablemente podría haber pedido un Uber pero para dejarles en claro mi mala suerte, mi celular se encontraba sin datos, bufe por estúpida, siempre solía olvidar la fecha en la que tenía que activar mi plan telefónico.
-No puede ser – sonreí mofándome de mi misma, eran las dos de la mañana y aún no encontraba ningún taxi, quizá lo mejor hubiera sido aceptar la invitación de Teo pero no quería que ninguno de sus amigos me viera llorar por él una vez más.
Entonces escuche algo que me hizo helar la piel, escuche ruidos cerca de donde estaba, volteé en varias ocasiones pero no vi nada, instintivamente comencé a caminar más a prisa, como si de esta forma pudiera evitar el peligro que estaba segura ahora se aproximaba, inhale y exhale un par de veces para así tratar de calmarme pero entonces escuche pasos tras de mí, alguien me seguía, las farolas estaban prácticamente apagadas, sus luces a estas horas de la madrugada eran muy tenues, tanto que apenas y podía ver, acelere aún más mi paso cuando me percaté de que un sujeto que vestía completamente de negro caminaba a unos cuantos metros de distancia mía, entonces corrí y aquel hombre hizo exactamente lo mismo que yo.
Mientras trataba de correr con toda mi alma, imagine cientos y cientos de escenarios en los que mis padres tenían que acudir a Fiscalía a reconocer mi cuerpo inerte, oh dios, que estaba pensando, las lágrimas que había retenido durante esa noche comenzaron a aparecer, definitivamente el acudir a la fiesta de Héctor había sido una mala idea.
-Ninaaaaaaaaa – alguien grito tras de mí, voltee y de hecho era el sujeto que vestía de negro, ¿cómo es que sabía mi nombre? Seguramente era un acosador, un violador o un asesino serial – Ninaaaaaaaaa, espera soy Trevor – volvió a gritar y entonces mi corazón dejo de martillear tanto como lo había hecho hace poco.
-Gracias a Dios eres tú – me acerque a Trevor.
-Por Dios Nina, ¿no has pensado en correr en las olimpiadas? Vaya que eres rápida – comentó con dificultad para respirar debido a la carrera – anda, vamos, ya es tarde para que te regreses a casa así y sola, por dios, al menos hubieras pedido un taxi o un Uber, ven, Diana esta esperándonos en el vehículo a unas cuadras de aquí, le he dicho que me era imposible alcanzarte – me ofreció la sudadera que justo había dejado en casa de Héctor y ambos nos dirigimos hacia donde estaba Diana.
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Hold on Love 🐺💕
Hombres LoboProbablemente si no hubiera salido esa tarde todo sería diferente, si lo sé, ya era demasiado tarde para pensar en ello. De todas formas no solía acudir a esas fiestas y si lo había hecho era para celebrar el cumpleaños de mi mejor amigo, aunque era...