Capítulo 21. El destino de las últimas Gemas

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El día transcurrió en mayor normalidad, la última clase era gimnasia, pero en esta, solo estaban Caroline, Kol y Aiden, los demás tenían gimnasia otro día, eso fue una lástima, porque ya habían dicho que agradecían a esa clase varias cosas, pero bueno, el maestro seguía siendo el mismo, y manejaba la misma energía y entusiasmo.

-En Midtown corren muchos rumores, pero debes aceptar que este último es impresionante- dijo Steve mirando a Kol, ambos estaban sentados en las gradas mientras los demás estaban distribuidos por todo el gimnasio, solo esperando que el maestro llegara.

-Lamentaré tener esta charla, pero ¿A cual de todos te refieres?- respondió Kol con tranquilidad.

-Tú has dado de qué hablar desde que llegaste, pero normalmente fueron cosas buenas- dijo Steve como si nada.

-¿Ya no?- preguntó el castaño confundido, la verdad ese lugar no dejaba de ser un preparatoria, y podría convertirse en un infierno por un mal chisme, aunque ese era el típico drama adolescente.

-Bueno, llegaste defendiendo a los perdedores, me rompiste la nariz cuando me metí con Elena, salvaste a Tiffany, porque esta se encargó de decirle a todos, ayudaste a Aiden, me quitaste el puesto de capitán y el equipo mejoró, y luego salvaste a Elena cuando la secuestraron, todo un héroe, pero ahora por los pasillos dicen que engañaste a Elena con Caroline, y que por esa razón ustedes siempre han tenido esa confianza, no hay que olvidar que a ella fue a la primera que conociste y se les ve muy juntos- respondió Steve sonriendo, Kol lo miró de reojo y bufó ante eso.

-Eres una vieja chismosa-

-¡Oye! yo solo repito lo que oí, espera ¿Es verdad?- Kol solo miró "al cielo" con resignación, ¿Por qué él?.

-No, no es verdad, y me encantaría saber ¿Quién empezó con ese chisme?-

-No lo sé, pero Chad fue muy específico cuando dijo que te metiste en su relación con Caroline, y sus compañeros de ese club de...periodismo, andan diciendo lo mismo, me consta-

-Lo dicho, vieja chismosa- murmuró Kol sonriendo, aunque sí era honesto, no es que le molestara, pero le sorprendía donde fue a parar una oración mal interpretada, y si el club de periodismo fue el que originó el rumor, sentía pena por Caroline, porque ella pertenecía a ese club.

-Solo me convertí en una sombra de este lugar-

-Vives mejor ¿No?- dijo Kol ahora mirando al rubio, el cuál asintió.

-La verdad si, no me sacaron del equipo, así que podré ir sin problema a la universidad, y mis notas son...decentes, aprendes a vivir con la burla, a fin de cuentas es mi karma-

-No se porque cambiaste, pero me impresiona- respondió el castaño riendo, y Steve asintió con tranquilidad.

-Pues si, lo dije, prefiero ver el drama de todos ustedes, porque...no engañaste realmente a Elena, ¿verdad?- Kol puso los ojos en blanco.

-Que no, adelante, esparce el rumor, que eso no es cierto vieja chismosa- dijo Kol riendo mientras empujaba al rubio y se levantaba de las gradas, Steve levantó las manos en defensa.

-Oye, yo solo preguntaba-

Elena y Josh estaban en clase de filosofía, e intentaban prestar atención, pero era sencillamente muy aburrida, o por lo menos era la forma en que el maestro la dictaba, porque hasta él se quedaba dormido por momentos. La pelinegra intentaba tomar apuntes porque era la única manera en la que no se dormiría, entonces, alguien golpeó con suavidad su hombro, llamando su atención, esta se giró con curiosidad y vio a un joven sonreír con suavidad mientras le pasaba una nota, y le hacía una seña de que venía de atrás, entonces vio que Tiffany y sus amigas sonreían, así que no podía ser nada bueno. Se giró nuevamente y desdobló el papel.

POWER RANGERS 2: Betrayal and RevengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora