Capítulo 44. Confesiones de corazón

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Poco a poco, todos se fueron de la mansión Mikaelson, no sin antes desearse una feliz navidad; Elena se despidió de Jenna porque pensaba quedarse con Kol pero esperaba que su "plan" funcionara, así que, luego de despedirse, la pelinegra se acercó a su novio.

-Oye, no quiero que suene mal pero...¿Quieres que nos quedemos en otro lugar?- dijo Elena mirando a Kol, el cual procesó eso un momento.

-¿En tu casa?- Elena sonrió levemente pero negó.

-No, me refiero a otro lugar, tu y yo solos- dijo Elena con algo de vergüenza, y Kol por fin entendió a qué se refería por lo que sonrió.

-¿Una propuesta indecente señorita Hansen?- dijo este sonriendo, y Elena rió levemente.

-Tal vez, ¿Me acompañaría señor Mikaelson?- dijo Elena sonriendo.

-Yo te acompaño a donde quieras mi amor, nos despediremos de mi papá y Rose, y nos vamos- dijo Kol tomando la mano de su novia, y Elena sonrió más tranquila.

Se despidieron de Richard y Rose, y partieron rumbo al hotel de la última vez, eso sí, esta vez Elena no tuvo vergüenza en entrar pero al ver que iba a pagar, Kol la detuvo.

-Pero fue mi idea- dijo Elena intentando convencerlo pero Kol negó.

-Lo sé, pero yo pagaré, no te preocupes por eso-

-Kol...- empezó Elena pero el castaño acarició las mejillas de esta con cariño.

-Mira, si quieres...tú pagas el desayuno, pero yo pago esto ¿Si?- dijo Kol mientras besaba con ternura los labios de su novia, y Elena asintió.

-De acuerdo, pero la próxima pago yo-

-Hecho-

Luego de pagar, subieron a la habitación, la cual estaría paga por el resto de la noche y parte de la mañana, así que podían estar tranquilos, eso sí, lo primero que hicieron fue entregar sus obsequios, Elena le dio un pequeño regalo "material" que era un buzo muy bonito.

-Gracias mi amor, que conste que no dejaré que te quedes con este- dijo Kol sonriendo pero Elena frunció el ceño.

-¡Yo no me quedo con tus buzos!- dijo Elena con "seguridad", pero Kol la miró incrédulo.

-¿Ah no?, duermes con ellos, ni siquiera finges que no los tienes- Elena empezó a reír y besó la mejilla de su novio.

-Es que son muy cómodos, pero necesito que te los lleves un tiempo y me los devuelvas, empiezan a perder tu olor...y si, soné como una acosadora- dijo Elena con resignación pero Kol empezó a reír.

-De acuerdo, pero este me lo quedaré yo- dijo Kol alejando el buzo de su novia, y Elena sonrió, por lo menos parecía que le había gustado.

-Es una parte del regalo, si soy honesta no sabía que regalarte- dijo Elena con tranquilidad mientras se acomodaba en la cama, solo se había quitado los zapatos. Kol por otro lado la miró sonriendo.

-¿Crees que soy complicado para los regalos?- dijo este bromeando mientras buscaba algo entre sus cosas, y Elena sonrió.

-No exactamente, pero ¿Qué pueden regalarte que ya no tengas?- dijo Elena con suavidad, y Kol la miró con ternura.

-A mi me va a encantar todo lo que tú me regales- dijo Kol con sinceridad mientras volvía a la cama para sentarse frente a Elena, la cual sonrió más tranquila.

-Me tranquiliza escucharlo- susurró esta mirando a su novio, el cual sonrió con tranquilidad.

-Antes de la "otra parte" de tu regalo, me toca a mi, feliz navidad mi pequeño lirio- Elena sonrió ampliamente mientras tomaba el pequeño paquete, era una cajita delgada, y la pelinegra no tardó en abrirla, encontrándose con una cadena delgada que parecía ser oro y tenía un pequeño "dije" con forma de lirio y en el centro un brillante corazón.

POWER RANGERS 2: Betrayal and RevengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora