Solo para tus ojos

Capitulo 11

- ¿Qué te han dicho de mí? 

-Bueno... Oliver si me ha comentado que eres un amigo y uno excelente. También en que tu familia es una de las más importantes, o que tus ojos son tan azules que es muy fácil perderse en ti.

-Wow... te comentó mucho. No sé nada de ti, no me ha dicho nada en lo absoluto. 

-Tienes mucho tiempo por conocerme. 

La velada comenzó en la habitación de aquel par, entre espaguetis y un poquito de refresco ya que no se podría beber vino, si a escondidas, pero, le dejaría ese privilegio a su chico rizado. 

-Louis, cuéntame de ti.  ¿Tienes novia? ¿novio? - Louis se atraganto.

- ¿Cómo? 

-Claro, ¿tienes pareja? - cuanto más sepan... hay más personas en peligro, pero ¿estaría negando a Harry? 

-No, bueno, aun no lose - no estaba mintiendo. 

Samuel se lo notaba como un muchacho inteligente, de ojos cafés y labios finos contextura bien formada se notaba que llevaba gimnasio encima y una buena diciplina, el cabello algo alborotado, ligero y despreocupado. 

- ¿De dónde eres, Samuel? 

-Soy de aquí, o de todos lados... me gusta viajar, conocer. - Louis asintió, para ser sincero solamente tenía en la cabeza Harry y sus rizos, Harry y sus manos, Harry y sus...- me dijo Oliver que a ti también te gusta conocer diferentes cosas.

- Eh si, bueno... trato de conocer e informarme antes que mis responsabilidades corran más rápido y me alcancen, ya sabes. ¿Cómo se conocen con Oliver?

-Pues, soy nuevo aquí... y con el primero que me acerque fue con Oliver, nos volvimos cercanos inmediatamente, él hablaba todo el tiempo de ti y quise conocerte. 

-Ah. entiendo. 

La cena fue exquisita, las conversaciones fueron variadas desde los lugares que se pudo conocer, hasta locas teorías conspiparanoicas, después, de mucho tiempo Louis pudo sentirse cómodo y dejar de ser un chico tímido o alerta de lo que sucede, de verdad se relajo y disfruto de aquel momento. No se encontraba tan pendiente de la situación afuera de aquellas cuatro paredes, tampoco se dio cuenta que había pasado media noche, que no hubo noticias de Harry, que debía ir a dormir con el... o que al final bebieron algunas copas de vino y eso provoco que este un poco, tan solo un poco, mareado.

Oliver se durmió en la silla, Samuel y Louis fumaban un cigarrillo compartido hablando diferentes cosas, sin sentidos.

-Vamos a lo serio, ¿Te parece? - Samuel le dio la ultima calada al cigarrillo. - Hoy comprobé mi teoría.

- ¿Cuál seria?

- Eres un tipo interesante, demasiado... interesante.

- No lo creo, soy un tipo como cualquier otro, eso no me hace interesante.

- Depende los ojos que te miren, Louis. No seas necio.

-Oye, mañana debo ir a clases... ¿Te parece hablar luego?

-Esta noche me quedare aquí.

-Okey, perfecto, si quieres puedes dormir en mi cama. Estará disponible, no dormiré aquí.

Samuel al escuchar aquellas palabras puso una mirada picarona y tal vez un poco indescifrable y por Dios que ni se le ocurriera preguntar donde estaría Louis metido, por que últimamente este chico no sabia ocultar las cosas.

Bebió su ultima copa de vino, recostó a Oliver en su cama y se encamino a pasos lentos y costosos a la habitación de el rizado.

Una vez en la habitación de Harry, logro ingresar fácilmente por que la puerta estaba un poco abierta, habían risas dentro de aquel lugar, se encontraba Harry y una mujer... ¡¿UNA MUJER!?