Kiss and Make up

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Al llegar al destino, los empleados de los Uchiha se encargaron de bajar las maletas, los padres y yo nosal jardín de la mansión, está se encontraba frente a un lago, hacia calor, nos ofrecieron margaritas.

Mis padres se unieron al resto de los padres de mis amigos y es que los Uchiha gustaban de invitar a todos a su casa de verbo yo primer fin de semana de las vacaciones.

Era algo así como una costumbre.

Yo busqué con la mirada a los chicos, ellos estaban a la orilla del lago, algunos nadaban y el otro tanto solo refrescaba sus pies a la orilla.

Me acerqué al grupo, saludé a cada uno de ellos a excepción de Sasuke y Hinata pues ellos se encontraban nadando, sonreí cuando me encontré con Naruto. Él correspondió el gesto.

No cruzamos palabras, no hacía falta. Con la mirada bastaba para decirlo todo.

Ino me ofreció una copa de vino blanco frío, la tome después de quitarme el vestido, hacía calor y la mayoría de las chicas vestían únicamente su bikini, un líjelo bronceado no le hace mal a nadie, me senté sobe una manta que se encontraba extendida en el suelo.

Naruto no se acercó a mi pero ocasionalmente nos mirábamos, el sonreía y yo le imitaba.

Me relaje un poco, apoye todo mi peso en las palmas de mis manos, heche la cabeza hacia atrás, cerré los ojos, los rayos del sol acariciaron mi rostro, podía escuchar el ruido que hacen los pájaros al cantar, los árboles moverse con el viento, era agradable estar ahí.

–Debes cuidar tu piel del sol.– la voz de Itachi me hizo abrir mis ojos, el sol no me lastimó ya que él se encontraba parado detrás mío, era como una especie de muro protector–Esto es bloqueador, ayudará a cuidar tu piel.

Itachi me ofreció un frasco blanco con el producto mencionado, yo lo tomé, sonreí, él hizo lo mismo y después de alejo.

Comencé a aplicar el producto sobre mi piel, Ino
Me ayudó a aplicarlo en la espalda.

–Es una hipócrita, Sasuke no tiene vergüenza.–Comentó Ino después de escuchar como Hinata reía a carcajadas. Sasuke la había cardado y posterior la arrojó lejos dentro del agua, estaba jugando en el lago.

–Tiene enormes pechos.–Murmuré al ver lo bien que se miraba en bikini, después dirigí la mirada a mi pecho, era pequeño, nada comparado al de ella.

–Cuando sea mayor la edad hará justicia, sus pechos terminarán en sus rodilla ya lo verás.

Ambas comenzamos a reír.

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Me recosté sobre la cama en la habitación que me fue asignada, estaba feliz pues el
Lugar contaba con un balcón con vista al lago, el sol comenzaba a ocultarse y el color naranja del atardecer se colaba por la venta abierta.

Fije la vista en el techo de la recámara, dejé de sonreír como lo había hecho toda la tarde, una lágrima descendió por mi mejilla, después otra y unas cuantas más le siguieron a esas, mi mente comenzó a torturarme con el recuerdo de Sasuke y Hinata en el lago, fingí que no me importaba pero la verdad era otra.

Cubrí con ojos con la palma de mis manos, mordí mi labio inferior con fuerza, quería gritar pero no me era posible, no podía montar una escena en casa de los Uchiha, con todos presentes.

Me puse de pie, me cambié de ropa, unos jeans ajustados, unos tenis blancos y un top verde, tome mi chaqueta de cuero, mi bolso y salí de la habitación.

Sentí ganas de salir a caminar, un minuto más dentro de esa casa sería casi como perder mi cordura.

Me escabullí para no ser vista por los adultos o cualquiera de mis amigos, necesitaba estar sola, pude salir por el jardín trasero. Conocía la casa, no era mi primera vez en el lugar.