💙En el Bosque🤎

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Inosuke en el bosque, cuando veía a manadas de jabalíes con sus rayones, siempre pensó que en algún momento iba va a tener eso, No por ser enamoradizo o algo por el estilo, no, él sabía que era la ley de la vida, no toda la vida estaría solo, él iba a encontrar alguien y se harían compañía mutua, quizá tener rayones, pero no estaba seguro de los últimos ya que no se veía a sí mismo como un padre, pero si de algo estaba completamente seguro, de todo lo que respecta el tema anterior, era que iba a elegir a la persona más fuerte e intimidante que en su vida iba a ver

Por eso, el día que llegó al entrenamiento del pilar de la roca, sus mejillas se tornaron de rojo, las pelusas blancas que aparecen cuando algo le gusta parecían volar a su alrededor y su pecho parecía un tambor con los fuertes palpitares de su corazón , un hombre grande y fuerte, que solo juntando sus manos en su posición liberaba una fuerza que hacía sus ojos brillar

Al principio se le acercaba queriendo pelear, pero cuando lo hundió de un solo golpe, estaba más que encantado! Empezó a seguirlo a todas partes, a obedecerlo al pie de la letra y siempre a andar cerca de él, siempre, no importa si le decía que no era necesario

Gyomei por su parte empezó a notar este comportamiento, él estaba cerca cuando tocaba su flauta, esa que a veces aburría a las personas, era un joven enérgico y vibrante, que se notaba que le tenía cariño

Pronto, se dió cuenta de que el chico actuaba como el animal que más quería en el mundo, como un gatito

Se notaba que era joven, su voz era algo masculina y olía a tierra mojada, arrebatado, llevado a sus ideas, era como un gato callejero que se colgaba a él, estaría mal dejarse llevar por alguien joven y aprovecharse de su cariño? Qué le dirían los demás pilares? La única que estaría de su parte sería Mitsuri, que adora todo lo que tiene que ver con el amor

Una tarde, cuando todos se habin ido del entrenamiento a misiones o sus hogares, Inosuke aprovechó para acercarse a él, y Gyomei se veía venir que ahora se le iba a acercar en un entorno más privado, así que trajo con él un cepillo

Por qué un cepillo? Simple, si actúa como un dócil gatito, va a tratarlo así

Sintió como se sentó al lado suyo, ya sabía por oído que tenía una máscara puesta, recitó un "Namu Abida Butsu" en su mente antes de romper la posición de sus manos, palpando su propia pierna con una sonrisa

-Quieres recostarte?

Gyomei hubiera deseado perder ver, casi podía sentir como al chico le brillaron los ojos, acostándose de inmediato en sus piernas boca abajo, sus muslos eran tan grandes, su fuerza tan admirable, era todo lo que quería en una persona que quería cerca de él todo el tiempo, y ahí fue cuando lo sintió

La sinfonía de un cepillo pasando por su máscara, peinando sus cabellos, que aunque no fuera en su cuerpo, lo relajó, por su sensibilidad al tacto podía sentir como su piel tenía reacción al escuchar y sentir como el cepillo pasaba por él, no se dió cuenta cuando se un momento a otro se quedó dormido, y Gyomei siguió con lo que hacía

Al cabo de un tiempo, Inosuke despertó, notando que el mayor le estaba quitando la máscara, ya se hacía una idea de por qué, Monjiro le había dicho que a pesar de su fuerza, él era más ciego que un topo, aprendiendo como los mismos la fuerza que tenían las rocas, su Aliento lo habrá aprendido solo? Esperaba que sí

Miraba curioso como los dedos grandes y algo suaves del mayor pasaban por su rostro, intentando leerlo, Gyomei se sorprendió, si no fuera por su voz y porque sintió su pecho plano, habría pensado por su rostro que era una mujer, y una bellísima, sus dedos pronto pasaron con cuidado por sus ojos, e Inosuke cerró sus ojos para dejarlo explorarlo, conocerlo... Reconocerlo como su amo y dueño

Sus dedos pronto bajaron a sus labios, se los imaginaba rosados, delicados, y el tacto, por alguna razón, tomó el impulso, uno que Gyomei no negó, de besarlo, besarlo con lentitud y dulzura, sus labios eran grandes pero delicados, el beso pronto se iba haciendo más largo, y al separarse, Inosuke se sentó en sus piernas, mirando y tocando su rostro también

-... No lo hagas...

-Eh?

-Se vienen tiempos oscuros, no sé si saldré con vida, si esto sucede... Te va a lastimar

Inosuke, rojo, juntó sus frentes, no sabía que ocurría, solo sabía que renunciar era imposible, no con él, no así, no cuando ese beso era el mejor contacto que ha tenido en su vida

-... Aprovecharé cada hora...

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En el bosque, Inosuke se había alejado de los demás, Kentaro le había dicho que estaba bien, sabía lo que había sucedido con el pilar de la roca con él, y que Inosuke debía sacar de su sistema todo lo que había aguantado hasta ese momento

Corría por su montaña, agitado, recordando como los kakushis lo sacaban de aquél lugar donde él sonrió en sus últimos momentos, gritaba y lloraba casi desgarrándose la garganta, cayendo al piso, tomando la tierra en sus manos y golpeándola, maldiciendo que le hubieran enseñado su fuerza, sujetando su pecho sintiendo como algo de él se había roto

De repente, una corriente de aire que traía la tierra que lanzó le recorrió el cuerpo, el miraba hacia todos lados, con sus ojos cubiertos de lágrimas Asintió y se levantó orgulloso, en ese momento levantó su mirada al cielo

-Nos veremos!! Te voy a encontrar!! Te voy a encontrar!!

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-Auch!

-Oh! Lo Siento, no quise asustarle, trataba de dirigirme al jardín de niños

-Eh? Y-Yo también! Soy el científico que les dará una demostración

-Oh? Entonces si les harás helado? Dijeron que posiblemente no vendrías!

-N-No! No podría defraudarlos... Me llamo Aoba Hashibira

-Wow... Me presento, soy el profesor de jardín de niños, puede llamarme Himejima

Ambos se tomaron la mano y se miraron, casi al mismo tiempo visualizando una casa en un bosque con un suave sonido de flauta, eso los hizo sonrojar y sonreír, quizá algún día, deberían ir juntos a averiguar por qué se imaginan al otro en el bosque

Crackship Week (KNY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora