A Viktor le gustan los hoteles.Le agrada que sean amplios y siempre atentos a cada una de sus peticiones, con mullidas camas y espectaculares vistas que le recuerdan a la casa donde vivía cuando era niño. Aunque el tamaño pueda considerarse un impedimento si llegase a hacer comparaciones de ese tipo, es un detalle que puede obviar.
Le gusta hospedarse en un lugar diferente cada vez, como el decorado puede ser tan diverso en cada uno de sus viajes, como la comida puede adecuarse hasta en la más mínima petición.
Sin embargo.
Ahora se encuentra con una cesta de ropa sucia en manos, descendiendo por los rechinantes escalones de aquel alojamiento, trata de llegar al cuarto de lavado, porque esta vez... debe hacerlo él mismo. Una absurda pelea de las tantas que tiene con su entrenador Yakov resultó el aquel inusual castigo, Viktor prefiere llamarlas peleas, no berrinches como el adulto tiende a vociferar. Bien puede buscar un lugar más cómodo por su cuenta, pero eso solo ocasionaría que haya más reprimendas durante los entrenamientos y aunque haya adquirido la fascinante habilidad de ignorar o burlar esas situaciones, sigue siendo un adolescente de quince años en una ciudad que no conoce.
Y un idioma que no tiene intención de aprender.
Solo espera que este torneo en Japón termine pronto, porque pese a que Tokio le haya resultado encantador, no está satisfecho con el hospedaje.
Cauteloso se inclina por la puerta abierta del cuarto de lavado, no parece ver a nadie en el lugar, más que unas cuantas envejecidas lavadoras que hacen ruido, aunque se hallen apagadas.
Una sonrisa se dibuja en sus labios cuando cree que podrá terminar cuanto antes y salir a tiempo a su entrenamiento en la pista de patinaje. Emocionado deposita su cesta sobre uno de los muebles, antes de inclinarse y revisar las instrucciones pegadas en la pared. Frunce el ceño cuando la sección en ingles está tan borrosa que debe adivinar la mayoría de lo que ahí viene escrito.
Bufa algo ruidoso, solo para pegar un brinco después por el sonido de cajas cayendo al piso que proviene de atrás. Se gira de inmediato para ver una zarrapastrosa sombra de lo que debería ser un humano...
O quizá una criatura de pesadilla o un asesino de filme barato.
—El jabón está en el estante del fondo'dattebayo.
Viktor sacude la cabeza al no entender ni una sola palabra dicha y más cuando la silueta se acerca revelando a otro muchacho de aproximadamente su edad, el cabello rubio alborotado desentonando por completo con las personas que ha conocido hasta ahora en la ciudad. Los ojos azules lo enfocan y el rostro se inclina a un lado quizá confundido por su nula respuesta.
—El jabón está en el estante del fondo —repite.
Y Viktor sigue sin tener idea de lo que ha dicho. Así que se aclara la garganta para poder decirle que no habla japonés.
—No soy de la ciudad. ¿Sabes inglés?
Habla lento esperando ser entendido. Da un cauteloso paso hacia atrás, cuando la desalineada persona hace amago de acercarse.
Su interlocutor enarca una rubia ceja, dando un paso más en su dirección.
—Lo que me faltaba —resopla, su manejo del inglés es casi perfecto al haberlo aprendido más por necesidad, en medio de tantas competencias y viajes —¿ahora cómo me deshago del vagabundo que vive en el cuarto de lavado?
Un ceño fruncido recibe a cambio.
Entonces Viktor sonríe amplio, juntando sus manos en señal de petición.
—¿Puedes salir? —esta vez señala la puerta y luego al muchacho rubio. Sonríe mas cuando el otro parece haberle entendido.
A grandes zancadas llega a la puerta, solo para cerrarla quedándose dentro de la habitación. Le devuelve la sonrisa.
Viktor está tentando a golpearse el rostro con la palma de su mano, debió bajar con Makkachin, aunque su felpudo caniche pueda parecer adorable, unos cuantos ladridos y gruñidos podrían ayudarlo ahora.
—Voy a llamar a Yakov —dice para sí sacando su celular, antes de retroceder abrupto cuando el desconocido rubio se acerca a prisa.
Viktor retrocede tan rápido como puede, trastabillando con los pequeños charcos de agua en el piso embadurnado con restos de jabón en polvo. Se gira como puede para colocar las manos y amortiguar el impacto. Sin embargo, ya lo han sujetado por la cintura deteniendo del todo su caída, contiene un grito ahogado, en tanto lo depositan con cautela en el húmedo piso.
—¡¿Y eso que fue?! — exclama ofendido.
—Ibas a caer y te ayudé —escucha esta vez en claro inglés.
Oh...
—¿Podías entenderme? —ahora reclama, incómodo por la forzosa cercanía. Su largo cabello se ha desparramado fuera del moño que los sujetaba con el ajetreo.
—Un poco...
—¿Cuándo dije que eras un vagabundo?
El otro tuerce los labios y recién es cuando nota curiosas marcas en las mejillas de esa persona.
—¿Y por qué te me abalanzaste como un criminal? —cuestiona ligeramente más cómodo.
— Porque había una cucaracha sobre la lavadora detrás de ti.
Oh...
Ahora Viktor se gira rígido hacia el lugar indicado. La espantosa alimaña observándolos desde arriba, el aterrador insecto abriendo sus membranosas alas... lista para atacar.
Así que grita, tan fuerte como puede y también logra oír el grito de fondo del otro chico.
Y pasan los segundos...
—¡¿Por qué gritaste?!
—¡Porque me asustaste con tu grito, dattebayo!
—¿Ahora a dónde se fue?
—¡Allí esta!
Y antes de que pueda reaccionar han tomado su cesta de ropa para aplastar al desagradable insecto, Viktor está tentado a gritar de nuevo, cuando cae en cuenta que su uniforme de entrenamiento tendrá restos de cucaracha, no, no piensa usar más esa ropa. Aunque la lave un millón de veces.
Suspira agotado, acomodándose su revuelto cabello.
—Bueno, bueno... —resopla— gracias de todos modos. ¿Cuál es tu nombre? ¿Vives aquí?
Una luminosa sonrisa le regalan, mostrando blancos e impecables dientes.
—Soy Uzumaki Naruto, también me estoy quedando en uno de los pisos, supongo que somos vecinos, dattebayo.
—Soy Viktor Nikiforov —le extiende su mano para saludarlo como está acostumbrado, sonríe amplio contagiado por la expresión del otro.
—Ah... que nombre tan raro para una chica...
¿Eh?
Fin.
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Bemycrack
FanfictionLa ilustración de la portada esta hecho por @NeblinaLlameante, por favor síganla. Seis historias cortas hechas para una actividad del grupo de Facebook "Club de lectura de fanfiction". Corresponden a las parejas de: Naruto/Viktor (capítulos 1,2 y 5)...